LOS ÁNGELES. El juez del tribunal superior del condado de Los Angeles James Steele decidirá el viernes en una vista si los restos de Rooney salen del tanatorio y se entregan a su mujer, Janice Rooney, o a su custodio.
El versátil actor de carácter, que fue una de las mayores estrellas de Hollywood en los años 30, murió el domingo a los 93 años de causas naturales. Había desheredado a su mujer y a todos sus hijos en un testamento fechado el 11 de marzo, dejando su patrimonio a su hijastro Mark Rooney, que junto a su esposa fue el cuidador de Rooney.
El conservador de Rooney, Michael Augustine, obtuvo esta semana una orden judicial para impedir que Janice Rooney se llevara los restos del actor de un tanatorio en Glendale, California.
Augustine dijo que Rooney quería ser enterrado en el cementerio Hollywood Forever de Los Angeles, donde yacen muchos actores de Hollywood, o en un cementerio para veteranos de Estados Unidos. Rooney estuvo en el ejército como animador durante la II Guerra Mundial.
