madrid - Preocupado, muy preocupado está Riccardo Muti por las consecuencias que los recortes presupuestarios en cultura, "pan para el alma", tendrán para el futuro de Europa, que corre el peligro de convertirse "tan solo" en un "museo bello". "Tenemos que hacer algo para evitarlo", insiste.

Un futuro "cada vez más próximo", destaca Muti, quien incluso se atreve a fijar un plazo: "tres décadas". Y es que, en su opinión, el problema no está solo en los países del sur, Italia, España, Francia, donde la tijera ha hecho ya estragos, "lo trágico -se escandaliza- es que ocurra ya también en lugares como Austria".

El director de orquesta napolitano, una de las grandes batutas que ha dado Italia al mundo, durante casi dos décadas director musical del Teatro alla Scala de Milán (1986-2005) y actual director de la Sinfónica de Chicago, hablaba así en Madrid en un encuentro con periodistas. Un encuentro en el que aseguró que una cultura débil, con menos recursos económicos para fomentar la creación y el pensamiento, "nos conduce a una peor sociedad".

En Asía -es su reflexión- países como Japón, China o Corea del Sur se han dado cuenta de ello e invierten cada día más en cultura, tan importante para Muti como la sanidad o la educación. Recortar en una, en otra o en las tres "nos hace peores". "Es nuestra obligación defenderlas, por dignidad", aseguró.

Riccardo Muti ha vuelto a España porque tiene un compromiso doble que le va a llevar a dirigir el Réquiem de Verdi primero en Toledo, este sábado en la catedral, en uno de los actos centrales de las conmemoraciones por el IV Centenario de la muerte del Greco - Efe