Iker Casillas, pareja de Carbonero, acompañó a la periodista y su retoño al domicilio familiar

madrid. Cinco días después de dar a luz, la periodista Sara Carbonero abandonó ayer el Hospital Ruber Internacional de Madrid en el que fue ingresada con su primer hijo, Martín, ya en brazos, acompañada por su pareja, el portero del Real Madrid y de la selección española Iker Casillas, mientras numerosos medios de comunicación esperaban la ansiada instantánea apostados en la puerta del centro médico.

Un poco antes de las cuatro de la tarde, la periodista deportiva, una de las más populares de Tele5, sonriente y sin dejar de mirar por un solo momento a su primogénito, agradeció y saludó con la mano a sus compañeros de profesión, mientras Casillas hacía lo propio, al tiempo que decía, esbozando una tímida sonrisa, "muchas gracias por todo".

Ataviados ambos con abrigos azul marino y pantalones vaqueros, la pareja posaba para la prensa gráfica sin dejar de mirar embelesada a su pequeño retoño, el cual permanecía oculto y arropado bajo una manta de color beis, protegido del frío y de los flashes de los fotógrafos.

tímidos y agradecidos Agradecida y algo tímida, la mediática pareja abandonó el centro hospitalario en su vehículo privado, conducido por el futbolista Iker Casillas, quien demostró tener una enorme paciencia y buen talante cuando nada más llegar al hospital para recoger a su familia se detuvo unos minutos para hacerse una foto con un teléfono móvil, a petición de un fan de mediana edad que salía en ese momento por la puerta del centro hospitalario madrileño.