francesc Homs es portavoz del Gobierno de la Generalitat y conseller de Presidencia y en declaraciones a Las mañanas de RNE, en el nuevo programa del novato en estas lides, Alfredo Menéndez manifestó con meridiana claridad la voluntad política del Gobierno de Mas de no cerrar, ni privatizar TV3 y los satélites mediáticos que funcionan en torno a la tele autonómica con excelentes resultados de audiencia. La crisis ha sometido a una cura de adelgazamiento de estructura organizativa y productiva en toda la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals, pero las medidas aplicadas han estado orientadas a la salvaguarda y pervivencia del ente autonómico que arrancó hace más de treinta años en base al Estatut de Autonomía (Sau, 1979) como conquista política e instrumento comunicativo necesario para los nuevos horizontes. Ante el desolador panorama de lo ocurrido en la comunidad vecina, el discurso de Homs supone aportación clarificadora del futuro empresarial y político de la comunicación pública en Catalunya, más allá del proceso político que actualmente se desarrolla (necesidad democrática de consultar a la ciudadanía mediante democrático referéndum). Resulta de agradecer que el representante del Ejecutivo catalán defienda públicamente la necesidad y presencia positiva de los diferentes canales televisivos y emisoras de radio. Frente a planteamientos centralizadores laminadores de derechos básicos como es el de la existencia de medios públicos hoy, viene bien bocanada de aire sensato al defender la existencia de lo público que funciona, equilibra informaciones dirigidas por intereses espúreos, y además tiene alto grado de aceptación social. Convicción política, después adaptación del modelo a los tiempos que corren y, finalmente, definición de las necesarias fuerzas productivas.