Vitoria, ciudad de exposiciones. Con una diferencia de minutos, dos de los espacios expositivos que se han ganado por prestigio el cartel de referencias en el ámbito cultural de la CAV sellaron su futuro inmediato con la presentación de dos propuestas llamadas a generar sensaciones y a provocar reflexión debido a su manera de presentar aspectos concretos e insospechados del mundo en el que señorea el ser humano. Por un lado, Montehermoso apura la esencia de lo audiovisual con Sonear, llenar el vacío de lo real, una propuesta de Alejandra Bueno seleccionada en la convocatoria de Proyectos Artísticos 2013. Por otro, Artium, que regresa de su letargo autoimpuesto para mostrar Serendipia, de la artista mexicana Tania Candiani para el programa Praxis -producción comisariada por Blanca de la Torre-, donde idea un laboratorio de hallazgos fortuitos. Dos pinceladas, dos argumentos, dos historias, dos ideas. Dos maneras de azuzar las expectativas previas.

Esta dupla artística, científica e interactiva inicia su andadura no sincronizada en lo alto de la colina medieval. El palacio que atesora tanta historia como la que generan sus propuestas, alberga una exposición sonora y visual. En el recorrido se invita al espectador a ser consciente mediante el sonido de las señales ocultas que rodean a la humanidad, como los campos electromagnéticos de las máquinas. Lo que se lleva a cabo es una traducción de datos y señales en sonido. Se narran relatos reales o ficticios que animan a la especulación del sistema, siempre partiendo de un mismo punto el empleo de la energía electromagnética que cada día va en aumento y se proponen diferentes vías de uso, tanto en el ámbito artístico y musical, como científico o social. Aunque la muestra está compuesta a partes iguales por imagen y sonido, el hilo conductor y el mensaje reside en el sonido. A través de él se intenta percibir un mundo nuevo que antes no conocíamos.

Proyectos Artísticos 2013 tiene el objetivo de ofrecer a los artistas residentes en la capital alavesa la posibilidad de presentar su trabajo, individual o colectivamente, a través de actividades que potencien su difusión y el acercamiento a la ciudadanía. La convocatoria recibió 25 proyectos de los cuales se seleccionaron cinco para su presentación en las salas del centro. Cinco trabajos específicos, desarrollados a lo largo de los últimos meses, que ofrecen una visión diversificada de las prácticas artísticas en Vitoria.

Desde Montehermoso, a través del cantón de San Francisco, se llega sin apenas esfuerzo a Artium, Centro-Museo Vasco de Arte Contemporáneo. Allí ya reside Serendipia, una propuesta de la artista mexicana Tania Candiani para el programa Praxis (Sala Norte, desde el 18 de septiembre hasta diciembre de 2013). El título hace referencia a aquellos hallazgos, en general científicos, pero también literarios o artísticos, que se realizan por accidente. Por azar. Sobre esta base, la artista crea su laboratorio en el que el visitante puede realizar, mediante distintos mecanismos y desde el azar, sus propios descubrimientos e incluso patentarlos.

Tania Candiani (Ciudad de México, 1974) es una artista multidisciplinar cuyo trabajo va desde la fotografía y el vídeo hasta delirantes instalaciones y creaciones de entornos artísticos. Realiza habitualmente sus proyectos, a menudo de carácter interactivo, en colaboración con el entorno más cercano y la comunidad en que se desarrollan. La artista establece en sus trabajos puentes con otros ámbitos como lo científico, la historia natural, la música, el lenguaje, el sonido o la más pura cotidianeidad. Candiani aborda estos territorios en clave artística y los muestra al público desde su particular visión, con un lenguaje común y una experiencia accesible al entorno para el que el proyecto ha sido concebido.

Para Artium, la artista propone un "laboratorio de encuentros fortuitos", una suerte de taller de descubrimientos que no parte de ninguna búsqueda en específico sino del puro azar. El método científico y empírico son aquí aplicados en pos de hallazgos accidentales.

Partiendo del emplazamiento del espacio de Praxis como laboratorio, Candiani propone determinadas herramientas de "invención" así como ciertos "modos de uso", que, sin intención de limitar al visitante-participante, pretenden aventurarlo en los terrenos del descubrimiento y la invención.

Búsqueda de patentes Como el punto de partida no es la búsqueda de un descubrimiento específico -o real-, las interpretaciones del proceso científico pueden ser aproximaciones simbólicas, poéticas, inventos imposibles... que en realidad pueden tomar cualquier forma. A su vez, los visitantes podrán legitimar sus inventos en la oficina de patentes Praxis creada en el propio museo para este proyecto. Tras analizarse su descubrimiento, y tras la aprobación de la artista, los inventores recibirán un certificado de patente sellado por la OPP (Oficina de Patentes de Praxis). Un dibujante presente en la sala plasmará sobre el papel el invento correspondiente.