málaga. El sueño de convertirse en estrella de fútbol europeo truncado por la promesa de un falso ojeador es el argumento con el que Diamantes negros, del director Miguel Alcantud, que se presentó ayer en el Festival de Málaga. El filme denuncia el tráfico humano y el "mercadeo" que hay en del deporte rey.
Alcantud narra el tráfico de niños con la historia de Amadou y Moussa, que son captados en Mali por un ojeador y llegan desde África con 15 años y la promesa de ser estrellas de fútbol. Separados de sus familias y traídos a Madrid para triunfar comienzan un periplo por España, Portugal y el norte de Europa, que les enseña de primera mano las sombras de este deporte. El director señaló que se trata de una película "muy documentada" en la que no se ha buscado hacer una crónica periodística. "Hemos intentado entrar desde los sentimientos, familiarizarnos con estos chicos, con lo que les pasa y vivirlo con ellos". Alcantud denunció que "traen chicos de 15 años de África para ser futbolistas, si les sirven valen, porque todo el mundo busca el nuevo Kanouté o Drogba, pero si no los dejan en la calle, tirados y abandonados de cualquier manera. Ni siquiera les dejan volver a África por una cuestión cultural y económica", señaló. Afirmó que la cinta "es un drama basado en hechos reales, ya que todo lo que está en la película le ha pasado a alguien que conoce. "Intentamos no hacer tremendismo, el caso medio es donde estamos nosotros, luego hay más o menos soluciones". Los actores fueron seleccionados en un casting, aunque, según el director, casi ninguno se había puesto antes delante de una cámara. Junto a ellos está Guillermo Toledo, para quien esta película "intenta abrir los ojos a la gente y está dirigida a los aficionados al fútbol, para que sepan cómo funcionan los equipos a los que apoyan y el mercadeo que hay". "No está nada mal meterle mano a los equipos de fútbol", afirmó Toledo, quien hincapié en que hay tres instituciones "intocables": "la iglesia, la monarquía y la Real Federación de Española de Fútbol, que pueden no pagar impuestos y pueden deber millones a las arcas del Estado".
También se vio ayer en Málaga Hijo de Caín, ópera prima de Jesús Monllaó Plana. Un thriller psicológico con grandes dosis de suspense que se adentra en una familia al borde del colapso y enseña el lado oscuro de las personas. José Coronado, María Molins, David Solans, Julio Manrique y Jack Taylor conforman el elenco del filme.