Vitoria. Ha pasado algo más de un mes desde la última cita del ciclo de Grandes Conciertos con el público, un paréntesis que hoy se termina con la tercera entrega de la octava edición de este programa. Aunque ya ha pasado la Semana Santa, su cercanía marca un programa protagonizado en exclusiva por La Pasión de San Juan de Bach, composición a la que darán vida el Coro de Niños Cantores de Windsbach y la orquesta Deutsche Kammer-Virtuosen de Berlín. Será a partir de las 20.30 horas en un Principal que todavía tiene entradas a la venta.

Estrenada en 1724, aunque sufrió varios cambios posteriores, esta obra es una de las dos pasiones que se conocen de Bach, a pesar de que en teoría compuso cinco. Bajo la batuta de Martin Lehmann, esta extensa pieza se irá desarrollando entre las paredes del teatro de la calle San Prudencio con la participación, como solistas, de la soprano Jutta Böhnert, la mezzo Rebecca Martin, el tenor Markus Schäfer, el bajo Thomas Laske y el barítono Henryk Böhm, que ha sido incluido en el reparto en sustitución de Rudolf Rosen, que en un principio iba a estar presente en Gasteiz.

Acompañando sus voces se encontrarán los componentes del reconocido coro de Windsbach, una veterana formación nacida en 1946 que está considerada como una de las mejores existentes dentro de su campo de acción.

Desde hace ya varios años (de hecho, sus giras conjuntas ya han pasado en ocasiones anteriores por Euskal Herria con, por ejemplo, La Pasión según San Mateo), la agrupación coral viene colaborando con la Deutsche Kammer-Virtuosen, orquesta nacida de la Sinfónica de Berlín a finales del siglo pasado.

De la unión de músicos y voces tiene que ser el público el gran beneficiado esta noche sobre las tablas de un Principal que ha retomado la marcha tras los últimos días festivos con un marcado carácter sonoro puesto que el martes recibió a la Sinfónica de Euskadi.

La cita de hoy marca el penúltimo recital previsto dentro de la octava edición del ciclo de Grandes Conciertos. La siguiente y última parada se producirá el próximo 10 de mayo en el mismo escenario. En esa ocasión, la orquesta Staatkapelle Weimar y el Coro Madrigal serán los encargados de interpretar el Requiem K626 de Mozart, así como la sinfonía Londres de Haydn, un encuentro para el que también quedan butacas a disposición del público, como ocurre con el recital de esta noche.