MADRID. Jennifer Garner ha admitido en el late show americano de Conan O'Brien que llegó a cuestionarse su decisión de tener un tercer bebé por lo agotador que es ser madre. La actriz, casada con Ben Affleck desde 2005 asegura que ahora está feliz con el benjamín de la casa, pero que a veces los niños la ponen al borde de un ataque de nervios.
"Queríamos un tercero, lo tuvimos y ahora no lo cambiaría por nada. Pero, ¿sabes cuando tienes dos niños y parece que tienes seis?", le contaba a O'Brien el pasado miércoles. Garner, de 40 años, se muestra decidida respecto a que ya no va a tener más hijos.
A sus niñas, Violet de seis años, y Seraphina de tres, se les ha sumado el pequeño Samuel que ahora tiene siete meses. Jennifer bromeaba en el programa sobre sus momentos de desbordamiento: "Casi quería salir a la calle y preguntarle a cualquiera '¿podrías venir a trabajar a mi casa, por favor? Sólo coge a un niño, haz cualquier cosa...'".
A pesar de todo Garner afirmó que no puede estar más feliz. "Samuel es tan bueno... Se ríe muchísimo, cree que soy súper divertida. ¿Qué más puedo pedir?"