Vitoria. Toca enrocar. Pero sin rock. Y sin jazz. Con un poco de todo. Porque, en su segunda edición, el festival DKastle toma la Torre de los Varona de Villanañe con una fusión todavía más amplia que en su año de debut. Tres escenarios componen la pista de baile -electrónica, reggae, hip hop, funk- con más de una veintena de artistas dispuestos a no dejar un instante de descanso desde las 18.00 hasta las 8.00 horas.
Amplificadores a tope es lo que propone el festival -en el que colabora DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA- para convertir el espacio del siglo XIV en una amalgama de estilos musicales, donde los monarcas de las dos fachadas rítmicas -platos y bandas en directo- podrían ser Cristian Varela y Dorian respectivamente.
Veinte años tras la aguja alimentan la trayectoria de Varela, el totem principal de la vertiente más enfocada a la pista de baile. Multipremiado y poseedor de una extensa discografía, será el más esperado de un DKastle en el que también habrá muchas otras voces para convocar al ritmo.
Voces como las del dj gasteiztarra Kike Pravda, que también suma, como Varela, una incontable remesa de visitas internacionales. Desde Vitoria viajará también GKSounds, que contará con varios representantes en el cartel del festival alavés. Aitor Izquierdo, Beatwave, Dj Kenner y Diego Polo componen la nómina del colectivo.
Además de estos emplatados, la tarde-noche-amanecer disfrutará de las selecciones y progresiones de Soulrack y Mikel_E, Dj Junior (ritmo, durante mucho tiempo, de la sala Santa Fe), el bilbaíno Dj Trampas, David Poo, el indio Hemu .Goa, el logroñés Ochoa, el también vizcaíno Alberto Jibaja, David Pereda, el alavés Dj Seks, Pepote y Dj Nead. RdeRumba, Dj y productor de uno de los grupos referenciales del hip hop estatal, Violadores del Verso, será también uno de los más esperados en Villanañe.
En equilibrio con la pinchada, la música en directo. Tras su reciente visita a México, la banda barcelonesa Dorian plantará su electro pop en Álava, en un escenario donde también mostrará su repertorio el grupo donostiarra Thee Brandy Hips, con Raincoat como última referencia de su mezcla de pop, noise, rock o indie.
Desde Santutxu se acercarán los componentes de Happy Morgue, provistos de un funk rock que se diversificará en funk electrónico de la mano de Mamba Beat, combo bilbaíno de sobra conocido en tierras alavesas, donde Gobeo Bay, que cierra el cartel, factura desde hace un tiempo su pátina reggae.
Un mercadillo y sorpresas por desvelar completan la amalgama que tratará de conquistar la torre. 30 euros de entrada son lo único que separa de esta melodía incesante, que busca su segunda edición.