Vitoria. No todo lo que sucede en el Azkena Rock se encuentra en Mendizabala. Un año más, el escenario de la plaza de la Virgen Blanca está de nuevo en marcha para adentrarse de lleno en el corazón de la capital alavesa. Ayer a la una de la tarde, el primero en hacerse con las céntricas tablas fue Charles Bradley & His Extraordinaires ante un público que capeó como pudo el calor. El norteamericano se movió como pez en el agua en una cita cargada de soul, funk y rhythm and blues. Su relevo en la plaza, a la misma hora, lo tomarán hoy Dick Brave & The Backbeats. Foto: Alex Larretxi