Vitoria. Sin demasiado tiempo para recuperar fuerzas, la undécima edición del Azkena Rock Festival afronta hoy su ecuador con todos sus escenarios ya a pleno rendimiento y también con la puesta en marcha de iniciativas paralelas, como el Txuleta & Rock que presentará el Jardín de Falerina. Todo para encauzar una jornada marcada por la presencia de Ozzy Osbourne, que regresa a Vitoria un año después de que 20.000 personas corearan su nombre en Mendizabala. Es verdad que esta vuelta no se va a producir como estaba prevista, es decir, con la formación original de Black Sabbath por los problemas de salud de Tommy Iommi, pero hay situaciones en la vida que no se pueden controlar.

De todas formas, los primeros latidos rockeros no sonarán en el recinto del festival sino en la plaza de la Virgen Blanca. Allí, a las 13.00 horas, será el turno de Charles Bradley & His Extraordinaires. Además, Falerina, desde las 14.00 horas, acogerá las actuaciones de Jon Basaguren, Dr. Sax y Dave & The Souldiers.

A las seis menos cuarto será el momento de que todo se ponga en marcha en Mendizabala, donde ya estarán rindiendo de manera normal los tres escenarios del recinto (en la jornada inaugural, con menos grupos, no fue así).

El arranque tendrá acento vasco, bueno, por lo menos en lo que a la procedencia de Lisabö y Willis Drummond se refiere. A partir de ahí, la banda sueca Pontus Snibb 3 dejará fluir su power pop para encaminar a los presentes a las actuaciones de Gun (habrá que ver en que estado está la formación actual), The Amazing (otros llegados desde el norte de Europa) y Rich Robinson Band. El cuervo se reencuentra así con un festival en el que junto al resto de los Black Crowes dejó un recuerdo imborrable en 2009, aunque en esta ocasión el regreso viene marcado por su último disco en solitario, Through a crooked sun (el guitarrista ya ha anunciado en una entrevista en exclusiva a DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA que no habrá tiempo para los temas del combo que fundó con su hermano).

Cuando la noche empiece a ganar terreno, el maratón sonoro tomará más velocidad si cabe. Los australianos The Screaming Tribesmen encenderán una mecha que avivará el heavy metal de Black Label Society, con el poderoso Zakk Wylde al frente. Casi en paralelo, el hardcore punk de Gallows hará acto de presencia, una de las bandas que más incógnitas presenta en esta edición tras el cambio de cantante del año pasado.

Ya cuando pasen diez minutos de las once hará acto de presencia Ozzy Osbourne dentro de la gira con amigos montada tras la repentina cancelación de los planes de Sabbath (cabe recordar que al cáncer de Iommi se han unido los desencuentros con el batería Bill Ward). Wylde volverá a hacer acto de presencia al igual que Geezer Butler.

El quinteto madrileño Lüger servirá de punto de unión con, sin duda, una de las formaciones más esperadas desde que el Azkena cobró vida en 2002, The Mars Volta. Los de Omar y Cedric son una banda imprescindible en el panorama internacional que acuden a la capital alavesa para presentar su último trabajo, Noctourniquet.

La madrugada será cosa de un viejo conocido del Azkena y de unos alemanes que no parecen tal. En cuanto al primero se trata de Danko Jones, que pisó Mendizabala en 2008, y que acaba de editar hace días el DVD Bring on the mountain. En lo que se refiere a los segundos, Dick Brave & The Backbeats le pondrán el broche rockabilly al día.