Vitoria. Para haberse casado en secreto en el monasterio de Leyre, hay una revista que tiene muchas fotos de la boda de Telma Ortiz, la hermana pequeña de la princesa Letizia; y Jaime del Burgo. Según ¡Hola!, las imágenes fueron compradas por la revista a una agencia de prensa especializada, "en el libre mercado de información gráfica". Añade que "la exagerada tormenta de comentarios ha dado lugar -en algunos casos tergiversando los hechos- a falsas teorías que conviene aclarar.

La pareja no era consciente de la presencia de los fotógrafos y por supuesto no se ha beneficiado económicamente de su publicación", concluye. Sin embargo, noticiastwins.blogspot.com.es se ha tomado el trabajo de hablar con especialistas que aseguran que algunas imágenes demuestran que la cámara estaba al lado y que "los fotógrafos no utilizaron teleobjetivo para captar las imágenes".

El problema es si técnicamente se puede hablar de exclusiva porque parece cierto que la revista pagó 120.000 euros a las agencias de información que consiguieron las fotos, 60.000 a cada una; pero ¿cuál fue el proceso y dónde acabó el dinero? Noticiastwins asegura que "si había alguna duda acerca de la cercanía con la que fueron realizadas las fotos de la boda, una imagen en concreto ha demostrado que la cámara estaba al lado de los novios.

Sin necesidad de teleobjetivos, y realizadas con un ángulo de entre 35-55mm, que requiere no estar a más de cinco metros de distancia, la foto en cuestión capta los pies de la novia, algo imposible si los fotógrafos hubieran tenido que activar el zoom. Según los expertos, y aunque la cámara sea de lo más profesional, hubiera sido imposible captarlos de cuerpo entero, con suelo incluido, si los fotógrafos estuvieran situados a gran distancia, ya que, al acercar el objetivo, la imagen queda centrada en tan solo una parte. Algo que no ocurre cuando es el fotógrafo, o la cámara, el que se acerca a lo que se quiere fotografiar, en este caso, Telma Ortiz y Jaime del Burgo el día de su boda.

Análisis Al detalle de haber podido captar los pies de la pareja, "se une el hecho de que las fotos de ¡Hola! no muestran prácticamente granulado. Es decir, tienen demasiada buena calidad como para haber sido conseguidas con el teleobjetivo. Así, pues, la foto demuestra claramente que la cámara estaba al lado de los contrayentes, o al menos, muy cerca de ellos, lo que lleva a pensar que los novios sabían de la existencia de los fotógrafos, algo que refuerza la teoría de que quizá hayan participado de la exclusiva".

¿Puede alguien emparentado con la Familia Real vender su vida privada? La carta que Jaime del Burgo publicó en El Mundo el pasado domingo, en la que descalifica con apelativos muy duros no sólo a la prensa, sino también a la Justicia, al no haberle dado la razón a Telma en sus contenciosos, no pega muy bien con la comercialización de su imagen, si es que se ha producido. Según vanitatis.com, el citado artículo recibió la aprobación de la princesa de Asturias, como probablemente también la tuvo la demanda que interpuso antes contra cincuenta medios y que perdió en todas las instancias judiciales.