Vitoria. Los ingredientes son de los mejores, ateniéndose a los actuales impulsos del telón. El director de moda y una de las actrices que lleva un tiempo estándolo. Juicio a una zorra es el título de la pieza que llega esta noche a las tablas del Teatro Principal con un Miguel del Arco en estado de gracia -su Veraneantes, que pasó hace unos meses, le empachó de manzanas en los Max- y una Carmen Machi que hace tiempo que se deshizo del estereotipo del papel televisivo único a fuerza de funciones y películas.
A Machi le parece "un regalo" interpretar a una Helena de Troya inteligente, dolida, apasionada y con un gran sentido del humor en la adversidad. La energía del personaje le ha permitido explorar muchos registros, partiendo de un montaje en el que se funden La Ilíada, La Odisea, Las Troyanas o Helena de Eurípides. "Las fuentes han sido muchas", reconoce Del Arco, "pero una vez asumidas dejé que la voz de Helena se hiciera fuerte con Carmen Machi en mi imaginación. La Machi es capaz de todo. Tiene todos los registros conocidos e incluso algunos de su única y exclusiva propiedad. Su registro cómico lo ha hecho sobradamente conocido la televisión pero, tal vez, no todos conozcan su registro trágico, ese capaz de hacer volar las palabras para hacer que el alma experimente una pasión propia con motivo de la felicidad y la adversidad en asuntos y personas ajenas".
Trasnochada, lenguaraz, borracha como una cuba "por la necesidad de beber permanentemente la droga mezclada con el vino que ofreciera a Telémaco para aplacar su dolor". Sin miedo, Helena desafía a todo. Hoy, a Gasteiz.