No es un fenómeno nuevo, pero con el tremendo descenso en la venta de discos, el patrocinio de marcas comerciales se está revelando como una sólida alternativa para la música, según se ha puesto de manifiesto en el MIDEM. La feria musical más importante del mundo ha contado con la experincia en este terreno del británico Mark Ronson, productor del disco Back to Black de Amy Winehouse, galardonado con tres premios Grammy.