BILBAO. Cerca de 600 personas disfrutaron del concierto que Mikel Urdangarin ofreció en el Kafe Antzokia de Bilbao el pasado 30 de diciembre de 2010. Desde ayer se pueden convertir en miles porque el cantautor de Zornotza residente en Gasteiz ha editado aquella velada en un doble CD que trata de "resumir y ordenar" una exitosa carrera musical que inició hace 15 años.

Urdangarin actuará hoy en el Klaret Antzokia de Balmaseda y dejará las presentaciones de Donostia y Bilbao para diciembre. En el caso de Vitoria, todavía nadie sabe.

Zuzenean 2010/12/30 es el título de un doble álbum que incluye 28 canciones y casi dos horas y media de música de un Urdangarin que ayer rebosaba felicidad en el mismo lugar en el que grabó el disco. "No sé si se puede hablar de cumplir un pequeño sueño pero al menos la decisión de grabar en directo sí es cumplir un deseo", aseveró. Era "algo cultivado desde hacía tiempo" y que le rondaba tras lograr un "sonido propio, especial y característico" después de trabajar con una banda consolidada en los últimos años: el guitarrista Rafa Rueda, los violinistas Bingen Mendizabal y Nika Bitchishvili, el pianista Koldo Uriarte y el percusionista Saihela Gazmaier.

Era el momento y Urdangarin no lo retrasó más. Con el lugar tampoco tuvo demasiados quebraderos de cabeza. En pocas plazas ha tocado tanto y con tanta aceptación como en Bilbao. Además, tenía "cierta tradición" de ofrecer conciertos navideños en el Kafe Antzokia, local que ha dejado también para la historia discos de músicos tan dispares como Ruper Ordorika y Platero y Tú, entre otros. "La noche acompañó y el ambiente fue estupendo, no se podía pedir más. Y creo que el arrope y el calor de la gente acaba notándose en el disco", indicó el músico vizcaino.

El doble CD incluye el concierto completo del Antzokia, con sus "imperfecciones y su magia especial, que sentí del principio al final", indicó el cantautor euskaldun. El trabajo se divide en una primera parte "más pausada y arreglada", donde "todo va como una locomotora" porque estaba "muy ensayado"; y una segunda con "un aire más festivo y abierta a la improvisación, quizás más desordenada pero muy viva y que sienta muy bien a la escucha", apostilló Urdangarin. "Tuvimos una buena noche", en la que se alternaron "momentos de fuerza e intensidad" con otros donde "los silencios son muy llamativos", apostilló.

Urdangarin se plantea este su primer disco en directo como una forma de "resumir y ordenar" su carrera. Especialmente el pasado más reciente, ya que "es imposible trasladar 15 años a un disco porque todo cambia, nosotros y las canciones, que aparecen reinterpretadas y con otro enfoque".

Zuzenean 2010/12/30 ofrece un vuelo riguroso por su discografía. Combina canciones de su primera época como Lekanpadean o Badira hiru aste con otras más actuales, caso de Esne saltzailea, Gezurrak o Zurekin. Su larga duración se completa con dos versiones. La primera es Martxa baten lehen notak, de Mikel Laboa, con una vestimenta "muy diferente de la original y elegante", y que supone "un homenaje pequeño a la gente que nos precedió, una forma de dar las gracias por sus regalos y contribuciones". La segunda, el clásico pop Wonderful life, de Black. "Es un capricho que da la nota exótica del disco. Es una canción que me hace sentir bien en los momentos bajos. Ha quedado bonita, espero que Black no se enfade", concluyó Urdangarin.