madrid. La exposición que el Thyssen-Bornemisza ha dedicado durante los últimos meses a Antonio López, que cerró ayer y se mostrará desde octubre en el Bellas Artes de Bilbao, ha registrado unos 315.000 visitantes -una media de 4.000 por día-, un nuevo récord para el museo.

Con estos números, el pintor y escultor de Tomelloso ha superado los registrados en la exposición Gauguin y los orígenes del Simbolismo que, inaugurada en 2004, ostentaba hasta ahora el primer puesto en el ranking de visitantes, con 279.591.

La muestra, de 130 obras, ha cubierto las expectativas, ya que Antonio López, uno de los artistas españoles más cotizados, no había organizado una exposición sobre su obra desde la que le dedicó el Reina Sofía en 1993. Ni siquiera la concesión del Premio Velázquez de las Artes Plásticas en 2006, que lleva consigo la celebración de una exposición en el Reina Sofía, convenció al artista para que exhibiera sus obras, ya que en aquel momento consideró que estaba muy cercana la muestra anterior.