dESDE hace cinco años los meses de sol han traído consigo hasta Gasteiz un bazar que destaca por su cosmopolitismo. El Festival de las Naciones, apostada primero en el parque de la Catedral Nueva y desde el pasado año en el parking de San Martín, viene siendo referente en los últimos tiempos de la cercanía cultural que implica la globalización. Diferentes aspectos sociales y culturales confluían en esta cita que en el presente ejercicio ha apostado más fuerte que nunca por una disciplina universal: la gastronomía.

Varias son las novedades que acoge la famosa feria que, con el afán de renovarse, ha abordado múltiples flancos en este 2011. Pero centrémonos en el aspecto culinario. El evento alojado en el espacio que acogerá el futuro Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz (el próximo año deberá cambiar de nuevo de ubicación) ha planteado, en consecuencia con su filosofía, un paso más hacia el aperturismo, en este caso gastronómico. Éste estará plasmado, entre otras novedades, mediante la incorporación de un nuevo continente a la cita. Asia, ausente en las anteriores ediciones, estará representado de diversas maneras aunque su vertiente culinaria, a buen seguro, seducirá a gran parte de los visitantes. Por otra parte, dos de los países tradicionalmente más célebres dentro del evento, México y Argentina, contarán con dos restaurantes temáticos para disfrutar de su excelsa tradición en los fogones. Burritos, quesadillas, carne a la brasa o mate para descubrir -o redescubrir en muchos de los casos- latitudes tan distantes a través del estómago.

Para los menos intrépidos, que prefieran adentrarse con tiento en estas tierras vírgenes, el festival ha preparado una de sus acciones estrellas. Dos de los más reputados chefs del Territorio -Luis Ángel Plágaro (La cocina de Plágaro) y Asier Urbina (Akelarre, Ikea)- jugarán con las tradiciones locales y foráneas sobre los fuegos. Los cocineros llevarán a cabo un show cooking (cocinarán en directo, vaya) entre los días 9 y 16 de junio, siempre desde las 18.00 hasta las 20.00 horas.

Y por si todo esto fuera poco, el evento ha dispuesto un stand dedicado a fomentar los múltiples valores del chocolate. El antropólogo Guillermo Xiu espantará ansiedades, depresiones, apatías, desnutrición y hasta extreñimiento aludiendo tan sólo al cacao.

Cosmopolita y multidisciplinar El cariz cosmopolita del Festival de las Naciones es obvio, aunque no lo es tanto la infinidad de disciplinas a las que llega. Interesados únicamente por su vertiente gastronómica o por el resto del pack, los visitantes al parking de San Martín encontrarán atracciones varias como las reproducciones de algunas de las maravillas del mundo que flanquean la entrada al recinto como la Estatua de la Libertad o la Gran Muralla China. Musicales en torno al Waka Waka, Lady Gaga o el mítico film West Side Story se aliarán con las decenas de puestos de venta y actuaciones varias para ofrecer al visitante la posibilidad de disfrutar de la jornada al completo en el recinto. Todo ello regado con más de cien cervezas diferentes y cincuenta vinos. Una vuelta al mundo a través de la música, de la cultura pero sobre todo... del paladar.