Vitoria. En 2008 apareció en el panorama estatal con su delgada figura, y con I love your glasses, casi sin darse cuenta, se plantó en escenarios como los del FIB o el Primavera Sound, atesorando por el camino diferentes galardones y, ante todo, metiéndose en el bolsillo a un público bastante numeroso. Hace unas semanas, Russian Red regresó al primer plano con nuevo álbum (Fuerteventura) y una gira que, de momento, no sólo va a cruzar toda la península sino que a principios de junio va a tener paradas en China. Eso sí, antes de cruzar medio mundo, hoy la cita es en Gasteiz. De hecho, es su estreno en la capital alavesa. Lo hará a partir de las 21.30 horas sobre el escenario de la sala Jimmy Jazz (18 euros en taquilla).
Desde que se dio a conocer hasta ahora han cambiado algunas cosas en la vida profesional de Lourdes Hernández (la persona que está detrás de la artista). Rompió con su anterior sello, cruzó su camino con Sony Music, fue preparando su segundo trabajo de estudio, se marchó a Glasgow para grabar, se topó con la producción de Tony Doogan y, por si fuera poco, contó con los músicos de Belle & Sebastian para acompañarse. "Hay relación con el primer disco en el sentido de que hay canciones más intimistas y acústicas, o delicadas. Pero luego hay otros temas que tienen otro estado de ánimo, más volumen, que son más pop. Ese nuevo ingrediente que se ha aportado a este álbum me gusta porque además es algo que se está trasladando al directo. La gente se va a encontrar otras facetas y es lo que estoy deseando enseñar", describe Russian Red, al tiempo que asegura que en los primeros conciertos de la gira está notando una buena recepción por parte del público. "Es un trabajo que me he tomado con calma, sin prisas ni fechas límites, con mucho relax como en la isla que da nombre a todo. Pero lo que sobre todo me ha ayudado es la experiencia que me dio el primer álbum. Ya me conozco los pasos y los procesos y eso me ha hecho estar más confiada, cómoda y libre", describe.
Sumergida en una promoción intensa que, sin embargo, asegura llevar "con mucha ilusión y con muchas ganas", Lourdes está en ese momento en el que "tengo unas ganas tremendas de que llegue cada fecha, cada sitio, cada concierto".
Aunque no quiere rechazar nada, deja a un lado la etiqueta de folk que algunos le han intentado colgar. Bueno, en realidad, le da igual que otros quieran definirla, "simplemente hago canciones", responde.
Eso sí, entre risas, Hernández explica que "no sería una seguidora de Russian Red; es que la música que siempre he escuchado no tiene nada que ver con lo que hago". Pero eso no es un problema, es un síntoma de que "tengo voz propia".