el recibidor de la almendra en que se constituye la plaza de la Virgen Blanca es también el jardín de uno de los comercios más emblemáticos de toda la ciudad. Lo es merced a su dilatada historia y su compromiso con el género de calidad. Basterra lleva 63 años suministrando productos alimenticios -en su mayor medida- y del resto de ámbitos del hogar a los gasteiztarras en general y a los habitantes del centro en concreto.

La filosofía del propio comercio y su clientela van de la mano como explica Félix Basterra, propietario del negocio: "Tengo lo que tengo porque me lo pide el público". Con este sencillo y funcional proceder el céntrico establecimiento se ha labrado una bien merecida fama en torno a su habitual selección de género. En todo caso, la citada labor excede la mera petición a los proveedores. "No esforzamos en buscar el producto que más se ajuste a lo que nos piden y, normalmente, suelen pedirme calidad", explica Félix. De esta manera, el recinto cuenta con una completo surtido en el que ningún producto destaca sobremanera entre el alto nivel medio.

Basterra se afana en indicar que su negocio no es una delicatessen sino que únicamente se surten de "producto selecto". Así, en lo que a charcutería se refiere el género ibérico saca la cabeza. De entre todo él, Félix recomienda el de Guijuelo, cuna salmantina del embutido ibérico. La pertenencia a la cooperativa Covirán otorga a Basterra acceso a la selección de la mejor fruta del Estado. "Ahora nos encontramos en época de cítricos y fruta con pepita", indica Félix. En este sentido, la naranja Navel Lane-Late se encuentra en el momento óptimo para su consumo. Por supuesto en cuanto a la pasta se refiere, Italia manda dentro de una amplísima selección. Una selección más cercana si nos adentramos en la sección de legumbres donde Tolosa tiene reservado un lugar preeminente. No obstante, Félix asegura que no se casa "con nadie". La labor de rastreo puede llevarle hasta Japón, pero la idea es conseguir el mejor género posible.

Por ello el establecimiento, dentro de su amplia sección vinícola, cuenta con productos de alta gama como el champán Moët. Y como acompañamiento, qué mejor que una lata de caviar. Félix reconoce que no siempre cuenta con este producto, pero si se pide se puede conseguir "enseguida". Un comercio tradicional, a la vieja usanza, donde la selección del género es el principal pilar. Un inestimable soporte para la magnificente obra en que se está transformando el casco antiguo de Gasteiz.