l La mujer de Woods pedirá 300 millones y la custodia de los hijos. La mujer del golfista Tiger Woods, la ex modelo sueca Elin Nordegren, quiere divorciarse del estelar deportista, y le pedirá 300 millones de dólares y la custodia total de sus hijos, según publicó ayer el diario New York Post. Nordegren ha contratado, según el diario, al famoso abogado Sorrell Trope, conocido por haber representado a la cantante Britney Spears en la batalla legal por la custodia de sus hijos, para intentar quedarse con la mitad de la fortuna que amasa el golfista número uno del mundo, valorada en 600 millones de dólares. La ex modelo está decidida a conseguir el divorcio y a quedarse, además, con la custodia de Sam, de dos años, y Charlie, de diez meses, ya que, asegura el Post, no cree que Woods sea una buena influencia para sus hijos, no sólo por las infidelidades, sino también por su adicción al sexo y a unos calmantes. "Tiger tenía que mejorar y no ha hecho nada. Ni ingresado en una clínica de desintoxicación ni ha dejado de tomar sus pastillas. Está actuando como un niño grande", explica una fuente cercana a la todavía mujer de Woods.

l Condenado el hijo de la millonaria Astor por engaño y estafa.

Anthony Marshall, el hijo de la fallecida millonaria Brooke Astor, que fue hallado culpable de aprovecharse de la senilidad de su madre para engañarla y estafarla, fue sentenciado ayer a una pena de entre uno y tres años de prisión por un juez de Nueva York. Marshall, de 85 años y en delicado estado de salud, deberá ingresar en prisión el próximo 19 de enero, según le comunicó ayer el juez Kirke Bartley, quien le impuso la condena por incrementar sin autorización el sueldo que cobraba por gestionar las finanzas de su madre y por otros delitos. Brooke Astor, una de las damas más conocidas de la alta sociedad neoyorquina que dedicó buena parte de su fortuna a lo largo de su vida a obras de caridad, falleció el 13 de agosto de 2007 a los 105 años de edad tras pasar sus últimos años de vida aquejada del mal de Alzheimer. La sentencia de tres años se debe al delito más grave del que se acusó a Marshall, el de robo de propiedades de su madre por subirse el sueldo sin autorización, pero el magistrado también le impuso un año de prisión por cada uno de los otros trece delitos de los que se le halló culpable, como el de alterar el testamento de Astor.