Durango. Niños y jóvenes abarrotaron la 44 Feria del Libro y el Disco Vasco de Durango, el certamen sobre literatura y música más importante de Euskadi, que se abrió ayer en la localidad vizcaína donde permanecerá abierta hasta el martes, con la cultura catalana como invitada.

En visitas organizadas por los centros escolares, alumnos de numerosos colegios de Euskal Herria se acercaron a los 156 puestos de esta feria, que presenta 459 novedades, entre libros, discos, vídeos y otros productos.

En una cita a la que cada año acuden numerosos escritores y músicos para firmar sus obras, durante las primeras horas de ayer fueron sobre todo componentes de grupos vascos quienes se dedicaron a firmar sus CD en Durango, como los miembros de Su Ta Gar, Txapelpunk y Seiren, entre otros.

Jon Irazabal, director de la feria, destacó que la imagen de un recinto lleno de niños se ha convertido en "habitual" el primer día de este certamen, del que explicó que este año posiblemente será el domingo el día de mayor afluencia de público, según las previsiones iniciales.

Irazabal recordó que uno de los objetivos del Instituto Catalán Ramón Llull es el de aumentar el número de traducciones de libros catalanes al euskera.

Sin embargo, manifestó que también resultaría deseable que los libros en euskera fueran traducidos al mayor número posible de lenguas, con el fin de que la literatura vasca pudiera llegar a un público más amplio.

Por otra parte, algunos representantes de editoriales y casas discográficas explicaron que no esperan que la crisis económica tenga una repercusión importante en la edición de este año.

"La verdad es que estamos llevando la crisis fatal, pero no espero que afecte a la feria, porque se celebra en fechas muy buenas, antes de las navidades, y no ofrecemos productos caros", destacó Mario Goñi, representante de la casa de discos Gor.

Uno de los puestos que ayer despertó (y a buen seguro lo hará durante todos estos días) una mayor curiosidad fue el dedicado a dar a conocer el libro digital, un formato en el que el Grupo Elkar presenta 50 títulos en euskera y castellano, entre las que figuran Bilbao-New York-Bilbao del escritor Kirmen Uribe, último Premio Nacional de Narrativa.

Mikel Esnal, miembro del equipo ejecutivo de Elkar, destacó que, en estos momentos, el libro digital es un mercado "en construcción" en el que aún no existe demasiada demanda.

De todas formas, son muchas las expectativas que existen sobre un formato que las tiendas pertenecientes al grupo editorial vasco empezaron a comercializar hace algo más de un año. Un futuro que ya es hoy, sobre todo para las nuevas generaciones que ayer abrieron a su forma y manera esta edición de la Azoka.