Decir El nombre de la rosa es decir Umberto Eco y es acordarse de la magnífica interpretación de Sean Connery en la versión cinematográfica que Jean-Jacques Annaud rodó en 1986. Pero la historia del monje investigador tiene también una adaptación televisiva que la RAI estrenó en 2019, llegó a TVE un año después, en abril de 2020, y que ahora, por fortuna para quienes todavía no han tenido la ocasión de verla, ha recuperado, con muy buen criterio, el canal Cosmo.

Esta adaptación de El nombre de la rosa tiene a su favor, para contar la historia con detalle, que cuenta con ocho capítulos, lo que supone cuatro veces más de las poco más de dos horas de duración de la película de Annaud. Y eso se nota en la factura de la producción dirigida por el italiano Giacomo Battiato, un cineasta curtido en los telefilmes.

La historia, no por conocida deja de tener un gran atractivo. La sinopsis oficial resume como “en 1327 el fraile franciscano inglés Guillermo de Baskerville y su discípulo, el novicio Adso de Melk, acuden a una abadía del norte de Italia donde se dirimirá un cisma ideológico clave dentro del cristianismo ... La celebración y el éxito de este cónclave se ven amenazados por los secretos de la abadía, donde uno de los monjes, el ilustrador Adelmo de Otranto, muere en extrañas circunstancias. El abad pide a Guillermo que investigue el crimen antes de la reunión, a la que acudirá un viejo rival del franciscano, Bernardo Gui, el sádico inquisidor enviado por el Papa. Para descubrir la verdad, Guillermo y Adso cruzan las puertas prohibidas de la mayor biblioteca del mundo medieval”.

Producción elogiada

Umberto Eco situó la acción en el siglo XIV pero algunos de los temas presentes en la obra son de lo más contemporáneos, como el poder, la riqueza, el fundamentalismo o la importancia del conocimiento.

El elenco está encabezado por John Turturro (Barton Fink, El Gran Lebowski) como Guillermo de Baskerville. Junto a él y como su rival, Bernardo Gui, el británico Rupert Everett (La boda de mi mejor amigo, Shakespeare in Love); el joven alemán Damian Hardung (Cómo vender drogas online); o Michael Emerson (Perdidos, Vigilados - Person of interest), entre otros.

La crítica no escatimó elogios para esta producción. The Independent escribió que “se trata de una producción muy bien montada y claramente un trabajo de amor para John Turturro. Su interpretación desprende calidez, sabiduría, compasión y un ingenio astuto”. Y el Daily Mail tiró de humor para preguntar “¿a quién se parece este monje detective? ¡Elemental, querido Watson!. Está claro que la miniserie de El nombre de la rosa es, en realidad, Las aventuras de San Sherlock”.