Las varices, esas venas retorcidas y dilatadas que suelen aparecer en las piernas, son, además de un problema estético, una causa de molestias y dolor.
Por suerte, existen varias maneras de tratarlas y prevenir su aparición. A continuación, ahondaremos en las causas de las varices y las opciones disponibles para su eliminación.
Causas de las varices
Las varices se producen cuando las válvulas dentro de las venas no funcionan correctamente, provocando un flujo sanguíneo inadecuado y el consiguiente estancamiento de la sangre.
Algunas de las principales causas son las siguientes.
Factores genéticos
Si tienes antecedentes familiares de varices, es más probable que las desarrolles.
Edad
Con el envejecimiento, las venas pueden perder elasticidad y las válvulas se pueden debilitar.
Sexo
Las mujeres son más propensas a desarrollar varices debido a los cambios hormonales durante la menstruación, el embarazo y la menopausia.
Embarazo
El aumento del volumen sanguíneo y la presión del útero sobre las venas pueden contribuir a la aparición de varices.
Estilo de vida
El sedentarismo, la obesidad y la falta de ejercicio pueden aumentar el riesgo de desarrollar varices.
Opciones de tratamiento
Existen diversas opciones de tratamiento para las varices, desde medidas caseras hasta procedimientos médicos más avanzados.
Aquí algunas de las más efectivas.
Medias de compresión
Las medias de compresión son una solución no invasiva que ayuda a mejorar el flujo sanguíneo en las piernas.
Estas medias aplican una presión gradual, siendo más ajustadas en los tobillos y aflojándose hacia arriba.
Se pueden usar diariamente para aliviar los síntomas y prevenir el empeoramiento de las varices.
Cambios en el estilo de vida
Adoptar hábitos saludables puede tener un impacto significativo en la prevención y tratamiento de las varices.
Algunas recomendaciones son las siguientes.
Ejercicio regular
Actividades como caminar, nadar o montar en bicicleta ayudan a mejorar la circulación sanguínea.
Mantener un peso saludable
Reducir el exceso de peso alivia la presión sobre las venas.
Elevación las piernas
Al elevar las piernas por encima del nivel del corazón varias veces al día, se puede mejorar el retorno venoso.
Evitar periodos prolongados de inactividad
Alternar entre estar sentado y de pie ayuda a evitar la acumulación de sangre en las venas.
Escleroterapia
La escleroterapia es un procedimiento médico en el que se inyecta una solución en las venas afectadas, provocando su cierre y eventual desaparición.
Es un tratamiento eficaz para varices pequeñas y medianas y generalmente no requiere anestesia.
Tratamientos con láser
El tratamiento con láser utiliza luz intensa para hacer que las varices pequeñas se desvanezcan.
Los láseres pueden tratar varices superficiales sin necesidad de incisiones.
Sin embargo, puede requerir varias sesiones para obtener resultados óptimos.
Ablación endovenosa
Este procedimiento consiste en insertar un catéter en la vena afectada y aplicar calor, ya sea mediante radiofrecuencia o láser, para cerrar la vena.
La ablación endovenosa es efectiva para varices más grandes y tiene un tiempo de recuperación relativamente corto.
Cirugía
En casos severos, puede ser necesaria la cirugía para eliminar las varices.
Los métodos quirúrgicos incluyen la ligadura y extracción de venas, donde se atan y retiran las venas afectadas.
La cirugía generalmente se realiza bajo anestesia local y puede requerir un tiempo de recuperación más largo.
Prevención de las varices
Prevenir la aparición de varices es posible adoptando ciertas medidas. Aquí algunos consejos útiles:
- Evitar el uso de tacones altos por periodos prolongados.
- No usar ropa ajustada que pueda restringir el flujo sanguíneo.
- Practicar ejercicios que fortalezcan las piernas.
- Seguir una dieta equilibrada para mantener un peso saludable y promover una buena circulación.
Las varices pueden ser una preocupación tanto estética como de salud, pero existen múltiples opciones de tratamiento y medidas preventivas que pueden ayudar a eliminarlas o minimizar su aparición.
Desde cambios en el estilo de vida hasta procedimientos médicos avanzados, es posible mejorar la salud venosa y disfrutar de unas piernas más saludables y estéticamente agradables.
Consultar a un especialista es siempre recomendable para determinar el tratamiento más adecuado según cada caso individual.