El culebrón de Nico Mannion llega a su fin. Tras ser vinculado con varios equipos durante las últimas semanas, el Baskonia ha hecho oficial esta mañana la salida del base italiano, con quien ha llegado a un acuerdo para la rescisión de su contrato.
"Baskonia y Nico Mannion separan sus caminos. El director de juego italiano y el club vitoriano han llegado a un acuerdo para terminar la relación que les unía desde el pasado verano. Baskonia quiere agradecer a Mannion su trabajo y dedicación durante este tiempo y le desea la mayor de las suertes en su futuro personal y profesional", reza el comunicado azulgrana.
De esta manera, el director de juego nacido en Siena fichará como agente libre por el Pallacanestro Varese, equipo presidido por la leyenda baskonista Luis Scola en el que podrá contar con más minutos que en Vitoria e intentar recuperar la versión que no ha conseguido demostrar durante la media temporada que ha pasado en el Buesa Arena.
Se trata de un movimiento beneficioso para todas las partes, ya que el Baskonia libera masa salarial que puede emplear para reforzar el puesto de base, en el que Codi Miller-McIntyre se está encontrando demasiado solo desde que comenzó el curso.
Mannion, por su parte, aterriza en un club en el que no tendrá la presión de competir en la Euroliga y en el que tendrán algo más paciencia con él, mientras que el Varese firma a un base con pasaporte italiano que, en caso de recuperar la versión que mostró años atrás en la selección transalpina, puede darle un gran salto de calidad a la plantilla.
Fichaje fallido
Aunque el club intentará reconducir la situación en el puesto de base en las próximas semanas, no cabe duda de que el fichaje en verano de Nico Mannion ha resultado un fracaso para los alaveses. El italiano llegó a Vitoria con un importante contrato y la misión de hacer olvidar a Darius Thompson, pero desde el principio sus prestaciones dejaron mucho que desear y tuvo que ser Miller-McIntyre, que traía el cartel de segundo base, quien cargara en su espalda con todo el peso de la dirección de juego del equipo.
Sus pobres números tanto en ACB (2 puntos, 2 asistencias y 1,7 pérdidas para 0,3 créditos de valoración en 10 minutos de media con porcentajes por debajo del 15% de acierto) como en la Euroliga (6 puntos, 2,2 asistencias y 1,2 pérdidas en 14 minutos de media) hablan del bajo rendimiento ofrecido por un jugador que cada vez que ha saltado a la cancha ha dado la sensación de estar lejos de su plenitud física y totalmente falto de confianza.
Tras este movimiento, el Baskonia se queda con únicamente dos bases en su plantilla: Codi Miller-McIntyre y Chris Chiozza. El club azulgrana cuenta con la opción de cortar al segundo antes del 31 de diciembre y, teniendo en cuenta que Chiozza aún no ha ofrecido con regularidad un rendimiento aceptable para la Euroliga, podría decantarse por ejecutarla para contratar un segundo base de mayores garantías con el espacio salarial generado entre ello y la desvinculación de Mannion.
Lo que está claro es que, teniendo en cuenta los problemas que arrastra el equipo en el puesto de base desde el inicio de curso y el minutaje casi inhumano que está acumulando Miller-McIntyre, las decisiones que tome el club en las próximas jornadas marcarán el resto de la campaña.
