Badalona, como ya ocurrió en la Copa del Rey, enterró las aspiraciones de un Baskonia que, pese a las expectativas generadas durante la liga regular, volvió a verse superado en competitividad y acierto por un Joventut que alcanza merecidamente las semifinales de la ACB. La puesta en escena azulgrana fue mejor que la del primer partido, pero con el avance de los minutos los errores, la incapacidad para cerrar el rebote defensivo, la fatiga, la acumulación de faltas y una nueva exhibición de Kyle Guy pusieron fin a la temporada de los alaveses.
Peñarroya apostó de inicio por un quinteto más sólido defensivamente que el del primer encuentro, formado por Thompson, Marinkovic, Giedraitis, Costello y Kotsar, lanzando un claro mensaje. Entró bien en el partido el Baskonia con una canasta de Giedraitis nada más empezar, pero el Joventut retomó las cosas donde las dejó en cuanto a acierto, con dos triples de Guy y otro de Vives para enfriar el arranque azulgrana. Durante los primeros minutos ambos equipos se fueron intercambiando golpes hasta que una serie de malas posesiones, la segunda falta de Thompson y un triple de Brodziansky forzaron a Peñarroya a pedir tiempo muerto al ver que la Penya se escapaba con el 16-11. Esta vez, eso sí, pudo contar con la ayuda de Heidegger, que hizo una buena labor en los tres minutos finales del primer cuarto, en los que los triples de Howard y Dani Díez contrarrestaron los puntos de Brodziansky por dentro (21-19).
En la reanudación, el Joventut siguió percutiendo en la pintura, mientras el Baskonia, a base de mostrarse agresivo en las penetraciones, logró encontrar buenas situaciones de lanzamiento exterior. Precisamente un triple de Sedekerskis situó a los vitorianos 23-25 arriba y llegaron después dos dianas de Howard y una de Giedraitis, pero la mala defensa y el acierto del Joventut impidieron que lograran amasar una ventaja más importante. Con el 33-36, Howard se marchó al banquillo con la segunda falta, el equipo se atascó en ataque y llegó un parcial de 7-0 comandado por la pareja Vives-Birgander, que hizo mucho daño a los de Peñarroya. Llegó a igualar Giedraitis el choque, pero una serie de despropósitos defensivos como no gastar una falta con Birgander en el poste y una antideportiva de Díez facilitó que el Joventut llegara al descanso con una renta de 46-40.
Estocada de Guy
Pese a las malas sensaciones con la que terminó la primera parte, el Baskonia regresó de vestuarios con mayor convicción que el Joventut y protagonizó un parcial de 0-7 nada más empezar gracias a las jugadas de pick and roll entre Thompson y Kotsar y un triple de Howard. Cuando parecía que surgían las dudas en el Joventut, apareció un Kyle Guy con la confianza por las nubes para tirar del equipo en ataque, tanto anotando como aprovechando su capacidad de atraer jugadores para distribuir juego. Al Baskonia su buen momento le duró poco y la Penya logró ponerse por delante e ir poco a poco distanciándose, aprovechando las segundas oportunidades concedidas por los alaveses en el rebote. A dos minutos y medio del final del tercer cuarto y con 62-56 en el marcador, Howard se cometió su cuarta falta en una acción evitable sobre Guy, que estiró la ventaja a los ocho puntos. Logró acercarse el Baskonia con el 66-62, pero una canasta de Tomic y un espectacular triple de nueve metros del tirador de Indiana sobre la bocina puso el choque ya muy cuesta arriba para los alaveses (71-62).
Si la cosa pintaba mal para los gasteiztarras, el arranque del segundo cuarto, en el que Thompson cometió su cuarta falta y el Joventut amplió su ventaja hasta los 15 puntos (77-62), terminó de enterrar las opciones azulgranas. El equipo, con varios jugadores aparentemente agotados, se mostró incapaz de cerrar el rebote y espeso en ataque, donde tampoco encontró su acierto habitual desde los 6,75 metros. La imagen de Peñarroya, abatido y sentado en el banquillo a falta de nueve minutos por disputarse, fue la perfecta muestra de la desesperación visitante.
Al cuadro verginegro le tembló la mano durante cinco minutos en los que fue incapaz de anotar, pero el Baskonia apenas logró sacarle partido, solo recortó seis tantos y por el camino perdió a Howard con su quinta falta. Dos destellos de Thompson y una canasta de Giedraitis llegaron a situar al equipo a seis puntos a falta de un minuto para el final (82-76), pero una vez más el rebote y el desacierto pesaron demasiado. Aquí termina el camino del Baskonia en el curso 2022-23. Un camino bonito, pero con final amargo. Ahora comienza el tiempo para reflexionar.
