El estado de salud de Pablo Laso, que ha sufrido un infarto de miocardio del cual ya se recupera tras haber pasado a planta en las ultimas horas, está marcando las horas previas del tercer partido de la semifinal liguera entre el Baskonia y el Real Madrid, muy decantada a favor de los blancos tras sus dos victorias en el WiZink Center.

Antes de que se lance el balón al aire esta noche, ambos conjuntos exhibirán una pancarta de apoyo al actual técnico del conjunto merengue y uno de los jugadores más importantes de la historia del club vitoriano. Una forma de darle aliento en uno de los momentos más complicados de su vida, aunque por fortuna todo hace indicar que su dolencia se va a quedar en un susto tras los pertinentes exámenes a los que está siendo sometido.

Laso, eso sí, se perderá lo que resta de temporada y en su lugar será su ayudante Chus Mateo quien dirija al equipo. El preparador gasteiztarra estará fuera de los banquillos por un tiempo indeterminado y deberá cambiar sus hábitos de vida para recuperarse por completo.