El Baskonia no va a tenerlo nada fácil para cortar su racha de cuatro derrotas consecutivas el viernes, ya que su próximo rival, el Maccabi Tel Aviv, llega en una dinámica totalmente diferente a la de los gasteiztarras, ya que ha tenido un excelente comienzo y el lunes confirmó su buen momento de forma con una autoritaria victoria en la Israel Basketball Super League, en la que es colíder. Concretamente, los entrenados por Sfairopoulos pasaron por encima del Bnei Herzeliya, que hasta entonces no había perdido ningún partido, endosándole un contundente 69-99.
Los más destacados del Maccabi fueron el base Keenan Evans con 19 puntos en 19 minutos de juego, Oz Blayzer con 18 tantos y Ante Zizic con 16, jugadores -especialmente Evans y Zizic- que también serán una amenaza en el Buesa Arena para el Baskonia el viernes a las 20.30 horas, además de los más que conocidos Wilbekin, Nunnally y Derrick Williams. Hasta el momento, el conjunto israelí, que fue incapaz la pasada temporada de engancharse a la pelea por el play off, está rindiendo a un nivel sorprendente, desarrollando un gran baloncesto que le ha colocado en sexta posición con un balance de cinco triunfos y dos derrotas en la Euroliga.
Además, han logrado triunfos de mucho mérito como el cosechado la semana pasada contra el Barcelona, vigente subcampeón de la Euroliga, al que vencieron por 85-68. Los cambios que realizó la dirección deportiva en la plantilla en verano -salieron Bryant, Dorsey, Hunter o Jones y llegaron Evans, Lessort, Nunnally, Williams o Reynolds- están dando sus frutos y el equipo, un histórico de la Euroliga venido a menos durante los últimos cursos, vuelve a estar metido de lleno en la pelea por el play off.