Hasta el minuto 38, el partido de Simone Fontecchio era perfecto. Impoluto. Sin fallo. Su carta de tiro era espectacular. El italiano, que ayer se echó el equipo a la espalda tras el irregular arranque de partido de Giedraitis, llevaba hasta esos momentos 20 puntos con un pleno en todos sus tiros: 6/6 en tiros de 2, 2/2 en triples y 2/2 en tiros libres para un total de 20 puntos. Perfecto.

El tres transalpino se iba hasta los 31 puntos de valoración gracias a sus 7 rebotes, cuatro asistencias, dos faltas cometidas y otras tantas recibidas. Números de estrella. De MVP. Tan solo el espectacular partido firmado por Tyler Dorsey y Clyburn en Moscú iba a impedir al ex del Alba de Berlín ser el mejor jugador de la jornada. Con 34 de valoración, acabó el del Olympiacos y con 32 el del CSKA.

Un poco menos hizo el exterior de Pescara. En 30 se quedó finalmente tras errar un tiro a menos de dos minutos del final. Su único fallo. El único lunar de una actuación descollante. Increíble. Su mejor papel en la Euroliga. Hasta ahora, la mejor actuación del italiano en Europa se había producido ante el Panathinaikos. Fontecchio acabó con una valoración de 21 puntos ante el cuadro heleno, gracias a sus 16 puntos, 7 rebotes, 4 asistencias y dos robos. Sin embargo, su carta de tiro no fue tan perfecta. 1/3 en tiros de 2 y 4/7 en triples.

Su mejor anotación hasta la fecha se había producido la semana pasada ante el Alba de Berlín, cuando alcanzó los 17. Sin embargo, frente al cuadro alemán su valoración se redujo a 18, cuando ayer ante el Mónaco se disparó hasta los 30. Como un cohete. Así va Fontecchio. Cada día a más. No hay más que comprobar que en el primer partido ante el Olympiacos, el casillero de su valoración acabó en cero. 5 puntos anotó en El Pireo.

Lejos de su gesta de ayer. Ante el Armani repitió los 16 puntos del día del Panathinaikos pero su peor carta de tiro le dejaron en 13 de valoración. Ante el Mónaco se fue a los 30. Números de figura. De líder. Siempre aportando. En los momentos calientes no se arrugó un Fontecchio anotador, reboteador y secante con sus rivales en defensa. Sin esconderse cuando la tensión era máxima. El mejor Fontecchio de principio a fin.

En el primer cuarto, en el que jugó los 10 minutos ya llevaba 9 puntos (2/2 en tiros de dos, 1/1 en triples y 2/2 en tiros libre), más tres rebotes y una asistencia para una valoración de 13 puntos. En los cinco minutos que jugó en el segundo parcial añadiría otros tres puntos merced a un acierto desde el triple, otra asistencia y otros cuatro puntos de valoración, 17 en este apartado al descanso.

Cuatro puntos merced a dos aciertos de tiros de dos y un rebote constituyó su aportación en los 7 minutos que jugaría en el tercer cuarto, en el que su valoración ya ascendía a 22. Misma cifra que la que llevaba en minutos disputados. El cuarto final lo jugaría al completo y sus cuatro puntos, tres rebotes y dos asistencias le sirvieron para añadir otros 8 puntos de valoración y acabar con 30. Un lujo. Lo dicho. El mejor Fontecchio.