3 Granger Un bastión impagable sin el que no se hubiese entendido el triunfo. Dirigió como los ángeles en una pletórica primera mitad. Sus triples y su acierto desde el tiro libre brindaron oxígeno en el epílogo.
1 Giedraitis Menos incisivo en ataque de lo que es costumbre en él. No hizo diana en ninguno de sus intentos triples y varias de sus canastas llegaron en transición. Al menos, materializó dos tiros libres determinantes.3 Fontecchio Por fin empieza a justificar las razones de su fichaje. Dejó muestras de su clase ante su exequipo, del que no se apiadó en ningún instante. Perdió algo de empuje en la recta final pese a un robo providencial.
2 Nnoko De más a menos. Aprovechó las sensibles ausencias interiores del Alba para erigirse en el amo y señor de la pintura en la primera mitad. Como el resto del equipo, no dio señales de vida tras el descanso.
1 Costello Mejoró su rendimiento respecto a los últimos partidos, aunque todavía sigue lejos de las expectativas. Sikma le dejó en evidencia en alguna ocasión. Su sangre fría desde el 4,60 también aseguró el triunfo.
1 Baldwin
Aún se sigue esperando al fichaje estrella de la temporada. Sus esporádicos destellos en el timón son insuficientes para un director que no termina de asentarse en la dirección. Granger está por encima de él.
2 Marinkovic Irrumpió en el partido con una fuerza devastadora. Anotó tres triples casi de una tacada que engordaron la ventaja en el recinto alemán. Tras el intermedio, se quedó seco y pasó desapercibido.
2 Sedekerskis De nuevo sólidos minutos en Alemania, aunque sin la exuberancia del último encuentro ante el Panathinaikos. Activo en el rebote y solvente en el trabajo defensivo recorriendo numerosos kilómetros.
1 Enoch De nuevo minutos con cuentagotas. Correcta aportación en la primera mitad antes de pasar a un sorprendente segundo plano. Ivanovic prescindió de él tras el descanso en una decisión controvertida.
1 Kurucs Seis minutos irrelevantes. Ni siquiera cuando el viento sopló de cara fue capaz de aportar algo positivo. Envió a Zoosman a los vestuarios tras propinarle un codazo completamente involuntario.