- Es un viejo conocido de la afición del Baskonia, que se ha enfrentado en infinidad de ocasiones a Nemanja Nedovic durante su periplo de cuatro temporadas en la ACB repartidas entre el Valencia Basket (2014-15) y el Unicaja (2015-18). El talentoso escolta serbio constituye la gran amenaza del Panathinaikos, cuya estabilidad en la presente Euroliga puede depender en buena manera del estado físico de su indiscutible killer en el perímetro.
Si el equipo vitoriano quiere ahorrarse un serio disgusto esta noche en la visita de un clásico de la máxima competición, su defensa deberá estrechar la vigilancia sobre uno de los anotadores más compulsivos que resisten a este lado del Atlántico. La semana pasada, sin ir más lejos, Nedovic salió prácticamente a punto por minuto en el OAKA ante un Fenerbahce que sufrió su inmaculada precisión desde el tiro libre con once de once aciertos en los minutos calientes. Y eso que el serbio todavía se encuentra lejos de su plenitud física tras haber dejado atrás en esta pretemporada el enésimo percance muscular de su carrera deportiva.
A sus 30 años, el exterior plavi no consigue desprenderse de esa etiqueta que pesa desde tiempos inmemoriales sobre él de jugador de cristal que se rompe con excesiva facilidad. Sus continuos pasos a la enfermería han lastrado sistemáticamente a alguien con las fibras demasiado sensibles al menor esfuerzo.
Durante su poco exitosa etapa en el Armani, donde militó entre 2018 y 2020, Nedovic tan solo pudo disputar 32 partidos en la Euroliga y se vio aquejado por numerosos contratiempos musculares que le privaron de la ansiada regularidad. Messina le abrió definitivamente la puerta y fue un Panathinaikos venido a menos quien le acogió con los brazos abiertos. En su primer año en Atenas consiguió 16 puntos de media por encuentro y resultó de lo poco salvable de un equipo que dio excesivos tumbos desde las primeras jornadas.
La carrera de Nedovic apuntaba muy alto en sus inicios y, de hecho, la NBA llamó a su puerta en el verano de 2013 tras cuatro temporadas notables en el Estrella Roja y otro buen ejercicio en el Lietuvos Rytas. El escolta, seleccionado en el puesto 30 del draft de ese año por los Suns, disputó como rookie con los Warriors un total de 24 partidos oficiales con unos discretos promedios de 1,1 puntos y 0,5 rebotes en seis minutos. Su protagonismo subió bastantes enteros en el filial de Golden State de la Liga de Desarrollo, pero Nedovic abandonó pronto la idea de triunfar en suelo americano y optó por regresar a Europa. En más de una ocasión, el Baskonia ha valorado la opción de incorporarle.