- Ricky Rubio ha vivido en su carnes esta semana lo peor de la NBA y es que el jugador es tratado como mercancía, como una mera cifra asociada a su contrato. El base de El Masnou fue traspasado de los Phoenix Suns, donde fue pieza importante la pasada temporada, a los Oklahoma City Thunder a cambio del veterano Chris Paul. Esta operación no fue recibida de buen grado por Rubio ya que le mandaba a un equipo sin aspiraciones. Pero ayer, en la noche del draft, el jugador catalán pudo esbozar una sonrisa de satisfacción ya que, dos días después, fue incluido en otro traspaso que le devuelve a los Minnesota Timberwolves, su primera franquicia en la NBA, a la que llegó hace diez años.

Utah y Phoenix han sido sus otros destinos antes de un regreso a una ciudad en la que se encontrará con Anthony Edwards, escolta de la Universidad de Georgia que fue el número 1 de un sorteo en el que no abunda el talento estelar y que se tuvo que celebrar de manera virtual. Ricky Rubio tendrá también como compañeros en un conjunto que quiere volver a los play off a Karl-Anthony Towns y D'Angelo Russell, dos de las estrellas jóvenes de la NBA, y quizás a Juancho Hernangómez, que puede renovar su contrato en Minnesota. Los Timberwolves también han adquirido los derechos de Leandro Bolmaro, el argentino de 20 años del Barça que, con apenas una veintena de partidos en la ACB, fue escogido en el puesto 23, aunque ayer confirmó que agotará esta temporada en el equipo culé, donde ha ganado protagonismo de la mano de Sarunas Jasikevicius.

Otro joven que juega en la Liga Endesa, el checo Vit Krejci, fue elegido en el puesto 37 y sus derechos pertenecerán a los Oklahoma City Thunder. De todas formas, el joven base-escolta del Zaragoza tardará en incorporarse a la NBA ya que a principio de curso sufrió la rotura del ligamento cruzado de su rodilla derecha.