- Toko Shengelia ha recalado en Moscú como uno de los bombazos del CSKA para recuperar el cetro continental conquistado en 2019 en Vitoria. Shavon Shields integra la rutilante nómina de apuestas del Armani Milan para, de una vez por todas, intentar ser una alternativa al poder establecido en Europa. Jayson Granger, por su parte, buscará reencontrarse con las mejores sensaciones en el Alba Berlín de Aíto García Reneses tras un trienio como azulgrana plagado de sinsabores debido a las lesiones. Turquía será la nueva parada en las carreras de Micheal Eric (Turk Telekom) y Semaj Christon (Tofas Bursa. Por último, Sergi García tratará de recuperar la autoestima perdida en el Andorra con la ayuda del gasteiztarra Ibon Navarro.

Todos ellos han causado baja en el Baskonia que se proclamó monarca liguero el pasado 30 de junio en la Fuente de San Luis de Valencia, aunque hay otro integrante de aquel equipo que rompió moldes en la pasada fase final de la ACB que sigue a la espera de resolver su futuro profesional. Los pronósticos que auguraban hace tiempo la extrema dificultad de Matt Janning para hallar acomodo en algún conjunto de Euroliga tras su discreta última campaña se han cumplido a rajatabla.

Cuando prácticamente todos los equipos de España y del Viejo Continente ya están configurados y han iniciado la pretemporada, el tirador nacionalizado georgiano se mantiene aún en el mercado como uno de los incontables nombres de prestigio a la espera de una oferta satisfactoria que le rescate de la lista del paro.

Entre los recelos existentes tras la aciaga carta de tiro firmada el pasado curso desde el perímetro y su elevada cotización que no estuvo en Vitoria en consonancia con su pegada ofensiva -esta rondaba el millón de euros anuales tras la consecución de un valioso pasaporte comunitario-, ningún club ha terminado de apostar definitivamente por el escolta de 32 años.

Con pasado en alguno de los equipos más potentes de Europa como el Montepaschi Siena, el Efes, el Lokomotiv Kuban y el propio Baskonia, Janning ha sido vinculado al Estrella Roja y al Gran Canaria. Las posibilidades de que pueda seguir disputando la máxima competición continental se han reducido ya a la mínima expresión y tan solo alguna lesión podría cambiar este inquietante escenario que se ha abierto en su carrera.

Janning vivió una situación similar en el verano de 2017. Tras su salida del Lokomotiv, tuvo que esperar hasta el mes de septiembre para ahuyentar los fantasmas que se cernían sobre su cabeza. En aquella ocasión, el Baskonia necesitaba con urgencia un anotador que supliese la baja de Jordan McRae tras sus molestias en el hombro que le enviaron al quirófano y el acuerdo entre ambas partes no se dilató en exceso.

El de Minnesota firmó un contrato temporal de apenas dos meses de duración, pero convenció al club con su rendimiento y terminó manteniendo su taquilla en el vestuario del Buesa Arena durante la totalidad de la campaña 2017-18. Más tarde renovaría a precio de oro gracias a la consecución de un pasaporte georgiano y compitió los dos últimos años en Vitoria sin ocupar plaza de extranjero en la ACB.

Los recelos existentes tras la aciaga carta de tiro firmada este último curso y su elevada cotización están jugando en su contra