Vitoria - Dentro de un verano escaso de movimientos, el Baskonia parece decidido por el momento a limitar su actividad a ejercer las opciones de renovación que le permitían los contratos de algunos de sus jugadores el pasado ejercicio. Primero lo hizo con el estadounidense Mike James y en la jornada de ayer lo repitió con su compatriota -aunque con pasaporte cotonú- Colton Iverson. De esta manera, la entidad de Zurbano ejecutó la cláusula que le permitía ampliar un año más de manera unilateral el vínculo entre ambas partes. El plazo para poder llevar a cabo esta operación expiraba hoy sábado y el club no ha querido dejar pasar de largo la oportunidad de poder contar con un jugador que garantiza intensidad, trabajo y garra y que, en su segundo curso en Europa, debería estar en condiciones de mejorar sus prestaciones.
Lejos del perfil de gran estrella -también, lógicamente, en lo que respecta al importe de su ficha-, Iverson sí ofreció un rendimiento más que interesante en la pasada campaña. Especialmente en la faceta defensiva y reboteadora, donde se convirtió en la clara referencia del juego interior azulgrana.
Una vez concluida la temporada, la primera intención del jugador nacido en Aberdeen era disputar las ligas de verano enrolado en las filas de los Boston Celtics (que tienen sus derechos en la NBA) para tratar de hacerse un hueco en la mejor competición del mundo. Sin embargo, apenas unas horas antes del inicio de estos torneos estivales, renunció a ser de la partida. El principal motivo no fue otro que el firme interés que le llegó desde el emergente mercado turco por hacerse con sus servicios.
De esta manera, el último y sorprendente campeón de la competición otomana -el Pinar Karsikaya- le trasladó una más que tentadora oferta para incorporarlo a su plantilla. De hecho, ambas partes alcanzaron un principio de acuerdo para unir sus caminos a partir de este verano. Sin embargo, para que se pudiera hacer efectivo oficialmente faltaba que el Baskonia dijese su última palabra.
Posible acuerdo Con la decisión de ayer, la escuadra vitoriana ya ha dejado claro que, a priori, cuenta con el concurso de Iverson o que, al menos, no está dispuesta a dejarlo escapar por las buenas. Y es que a partir de estos momentos se abre un nuevo escenario en el que la negociación puede ser el camino a seguir por todos los implicados.
En este sentido, no es ni mucho menos descartable que, pese a su renovación oficial de ayer, el pívot americano no vista de azulgrana la próxima temporada. Claro que, en ese supuesto, el Pinar Karsikaya (o cualquier otro club que apueste por hacerse con sus servicios) estaría obligado a alcanzar un acuerdo con el Laboral Kutxa y pasar por caja para que la entidad de Zurbano le permitiera tomar el camino de salida.
Si no es así, al menos el Baskonia sabe que Velimir Perasovic podrá tener bajo sus órdenes a un auténtico guerrero de la zona que la pasada temporada ya fue capaz de firmar medias de siete puntos y seis rebotes tanto en ACB como en la Euroliga.