Vitoria. Omar Cook podría convertirse en el elegido por la dirección deportiva para solventar las carencias en la dirección de juego del Caja Laboral desde que arrancó la temporada. El club vitoriano, que lleva varias semanas escrutando el mercado, se ha interesado por la situación del exjugador de Unicaja. Han existido contactos con el agente del timonel norteamericano, que se encuentra ahora mismo apartado de la disciplina del Armani Jeans de Sergio Scariolo.
El club lombardo pretende desprenderse del base y de Richard Hendrix para aliviar su carga salarial tras consumarse su eliminación de una Euroliga en la que ha ofrecido una imagen pésima. Ayer, sin ir más lejos, comunicó a media tarde que ambos jugadores quedaban liberados hasta nueva orden de su obligación de acudir a los entrenamientos con el resto del grupo. La directiva del Armani, en todo caso, trata de rebajar los costes de la rescisión y ha pedido a ambos jugadores que se busquen equipo. A ninguno de los dos les faltarán pretendientes.
Cook aparece ahora mismo como la primera opción del Caja Laboral, aunque en las últimas horas han salido a la palestra otros nombres, como el de Walter Hodge, para reforzar la dirección. Ninguna operación de este calibre podrá cerrarse, sin embargo, hasta que el club le haga hueco en el vestuario. Así las cosas, el primer paso que se espera es la confirmación de que Taylor Rochestie, un jugador que apenas ha entrado en los planes de Tabak desde que llegó, rescinde su contrato con el equipo azulgrana. Su salida propiciaría que Cook, el mejor colocado, u otro base llegaran a Vitoria para colmar una necesidad que desde la directiva jamás se ha negado que existiera.
A partir de ahí, habrá que ver qué sucede con el juego interior. A pesar de su mejora en los últimos partidos, el papel de Milko Bjelica no convenía en exceso, no tanto por el rendimiento y la disposición del jugador como por su perfil. Se buscaba un tipo de pívot más físico y con presencia en el rebote. Los problemas económicos del club vitoriano, no obstante, pueden salvar al poste montenegrino, para quien el propio Hendrix y el australiano Aron Baynes han sonado como sustitutos.
Baynes asiste con calma a la subasta que ha abierto el Union Olimpia para los equipos interesados en hacerse con sus servicios. Su actual club, eliminado en la primera fase de la Euroliga, se ha mostrado receptivo ante la opción que se le presenta de traspasar a un jugador por el que ya han preguntado tanto el Maccabi como el Caja Laboral, tal y como adelantó ayer DIARIO DE NOTICIAS DE ÁLAVA. El pívot se limita por ahora a seguir con su excepcional temporada, en la que está firmando unos números de escándalo.
"Por ahora son sólo rumores", aseguraba Baynes en declaraciones a un medio de comunicación esloveno. "Prefiero no darle muchas vueltas. Actualmente estoy centrado en jugar para el Union Olimpia nada más", aseveraba el poste oceánico, que ha firmado casi un doble-doble (13,8 puntos y 9,8 rebotes) en la primera fase de Euroliga, en la que ha acabado como máximo reboteador.