Madrid. Trifón Poch, entrenador del Asefa Estudiantes, se mostró sólido y contundente ayer al hablar del futuro de su equipo y afirmó que conseguirían la salvación "seguro", cumpliendo el objetivo que reza en la pizarra del vestuario, "cuatro partidos, cuatro victorias".
"Estoy contento con el equipo, Estamos defendiendo más sólidos y estamos anotando con cierta fluidez y con un juego consistente. Éramos el peor equipo en porcentaje de tiros de dos y de tres puntos, el equipo que más puntos recibía y el que menos asistencia daba. Hemos mejorado en todo", explicó el técnico estudiantil.
"Hemos mejorado en autoestima y confianza y ahora damos otra imagen a los aficionados. Los jugadores saben que es posible conseguir nuestro objetivo y se sienten capaces de ganar cualquier partido", añadió el entrenador colegial. El no fichaje de Louis Bullock no ha influido en un equipo que ha pasado por mil vicisitudes a lo largo de la temporada. "Lo mejor es el grupo humano del vestuario. Ahora no hay nadie que reme en dirección contraria como sí ocurrió durante la primera vuelta. Lo de Bullock es de auténtica mala suerte, que se lesione en el primer entrenamiento. Nos podía haber ayudado, pero al no integrarse realmente al grupo, no lo hemos notado", observó.
El equipo está sometido a una tremenda presión porque los jugadores son conscientes de que cada partido es una final que puede suponer el descenso de categoría. "Sabemos que nuestra intensidad debe ser máxima en cada partido y que es muy complicado prepararse para una situación tan dura y exigente como en la que estamos. Por eso digo que el que mejor sepa convivir con sus propios errores, tendrá más opciones de conseguir su objetivo", analizó el cordobés.
En el "universo" del Asefa Estudiantes apenas hay espacio para algo más que el próximo partido, una finalísima ante el Blusens Monbus.
"Las matemáticas no son buenas consejeras. Es una tontería hacer números porque luego pasa lo impredecible. Nosotros pensamos en ganar a los gallegos y después, el resto de partidos que nos quedan", comentó.
"Desde que llegué al equipo el mensaje es el mismo. Doce partidos y doce victorias. Ahora estamos en cuatro partidos, cuatro victorias. Es lo que reza en la pizarra del vestuario. Y la conclusión es que nos salvamos seguro", finalizó.
