Vitoria. Tras largas semanas en las que ninguna de las partes parecía dispuesta a expresar claramente su postura, el Ayuntamiento puso ayer sus cartas sobre la mesa a través de la concejala de Hacienda, Marian Gutiérrez. Como este periódico publicó el pasado mes de julio, la reforma del Buesa Arena iba a traer consigo la obligación de que el Baskonia se trasladara a jugar sus partidos a otro pabellón durante varios meses. Finalizado el proceso de adjudicación de las obras, los plazos han quedado marcados en un mínimo de tres meses. A partir del inicio de la próxima temporada, allá por octubre, y hasta enero de 2012, el equipo vitoriano tendrá que disputar sus encuentros en un pabellón que, presumiblemente, iba a ser la plaza de toros de la capital alavesa. Un coso -propiedad del Ayuntamiento- que necesita un laborioso y costoso proceso de adaptación para convertirlo en un multiusos capaz de albergar al Caja Laboral.
Desde el verano, Consistorio y Diputación habían preferido jugar al despiste y mantener aletargado el debate sobre cuál de las dos instituciones debía hacerse cargo de la adaptación del recinto taurino. La semana pasada, el Ejecutivo foral subrayó que el gasto tendría que ser compartido por ambas partes. Pero, por lo visto, parece que el gabinete Lazcoz no está por la labor. "Hemos dejado claro por activa y por pasiva que el Ayuntamiento no va a gastar ni un duro en esa reforma. La opción que teníamos era ceder en concesión la plaza de toros para que se efectúen las reformas necesarias, pero de las arcas municipales no va a salir un solo euro", matizó Marian Gutiérrez.
Si no se alcanza un acuerdo sobre la forma de costear la adecuación de la plaza de toros -de momento las dos instituciones han preferido dejar claras sus posturas de forma pública antes de sentarse a la mesa- el Baskonia se vería obligado a retomar la idea de trasladarse fuera de Vitoria -Pamplona y Bilbao son las principales alternativas- durante los tres o cuatro meses que se prolongue el exilio azulgrana. "Cuando alguien tiene un problema está muy bien que quiera colaborar con otros para solucionarlo, pero lo que no puede ser es que ese problema acabe siendo siempre del mismo, que normalmente es el Ayuntamiento", apuntó la concejala de Hacienda.
En su opinión, debe ser la Diputación -propietaria del Buesa- la que pague la adecuación de la plaza de toros, puesto que ésta nunca se realizaría si no fuera por la reforma del hogar habitual del cuadro baskonista. Por su parte, el ente foral considera que no tiene por qué sufragar un gasto con el que el Consistorio "salvaría los muebles" en lo que a su recinto se refiere. Y es que el coso vitoriano ha estado en el centro de la polémica desde sus albores al no poder acoger ninguna otra actividad que no fueran las corridas de toros, al menos hasta ahora.
Por el momento, ambas partes todavía no han mantenido una reunión para intentar alcanzar un acuerdo al respecto. El Baskonia, mientras tanto, opta por el más absoluto mutismo. El club azulgrana mantuvo ayer por la mañana un encuentro con la Diputación en el que ésta le trasladó todos los detalles del proyecto definitivo del Buesa. Ahora, la entidad presidida por Josean Querejeta debe aún hablar con Patxi Lazcoz para explicarle las necesidades del equipo a la hora de trasladarse a una renovada plaza de toros que, aun con adaptación de por medio, nunca podría acoger en su seno a todos los abonados baskonistas, al rozar únicamente los 8.000 asientos.
Calefacción, vestuarios, videovigilancia, iluminación -uno de los puntos más complejos-, son algunos de los detalles de una mejora cuya cuantía es, a día de hoy, impredecible. "El modelo de resolver los problemas en este Ayuntamiento es esperar a que los resuelvan otros", criticó ayer José Navas, portavoz de Ezker Batua. Precisamente, su grupo ya solicitó el pasado 5 de noviembre -sin éxito- la firma de un convenio interinstitucional para reformar cuanto antes el recinto taurino y que el Caja Laboral no se viera obligado a buscar acomodo en otra ciudad. Jone Zamarbide, representante del PNV, también instó al Ejecutivo local a mover ficha con la mayor celeridad. "No se puede funcionar de forma tan irresponsable. El Baskonia debe jugar en algún sitio durante esos meses, y mejor que lo haga en Vitoria que fuera", recordó la edil jeltzale.
Conocida la postura oficial de Ayuntamiento y Diputación, y a la espera de que el Baskonia dé un paso al frente para, entre otras cosas, aclarar si estaría dispuesto a sufragar de su bolsillo parte de la adaptación de la plaza, los próximos días se antojan cruciales para despejar la incógnita sobre el futuro hogar temporal del equipo durante la futura diáspora azulgrana.