vitoria. El duelo del próximo domingo ante el Manresa significará, salvo contratiempo de última hora, la vuelta de Stanko Barac a las canchas de juego. El pívot croata, que se ha perdido los dos últimos desplazamientos del Caja Laboral a Sevilla y Fuenlabrada debido a una protusión discal que sufre a la altura de L5-S1, ha agotado el plazo de dos semanas que el club fijó para su vuelta, por lo que incluso hoy mismo podría reintegrarse a la disciplina azulgrana y reaparecer ante el conjunto de Jaume Ponsarnau.

Su probable regreso aliviará el difícil panorama en el juego interior baskonista, donde Splitter y Teletovic están aglutinando la mayoría de los minutos ante la poca confianza de Ivanovic en las prestaciones del temporero Golubovic. La alternativa de Herrmann como falso cuatro ha permitido al técnico montenegrino sobrellevar la falta de efectivos.

Quien no tiene una fecha exacta para volver a vestirse de corto es Lior Eliyahu, que prosigue su tratamiento conservador para poner fin de una vez por todas al calvario que arrastra desde hace tres meses. El ala-pívot israelí no ha mejorado en exceso de sus problemas de pubalgia y, en su caso, la cautela preside cualquier pronóstico de este tipo.

Su última aparición data del 25 marzo coincidiendo con el segundo partido del cruce de cuartos de la Euroliga ante el CSKA. Desde entonces, no ve la luz al final del túnel y se mantiene en el dique seco. El objetivo reside en que pueda llegar en buenas condiciones a la pelea por el título liguero.