- Por fortuna, la operación retorno de Semana Santa ha acabado sin víctimas mortales que lamentar en las carreteras alavesas. Y lo ha hecho además sin aparatosos accidentes, pese a que no han sido pocos los conductores que decidieron desplazarse en sus propios vehículos para poner rumbo a sus vacaciones de primavera, lo que ha hecho que se hayan vuelto a ver cifras de movilidad como las de antes de la pandemia por coronavirus.

En este sentido, el Departamento de Tráfico del Gobierno Vasco calculaba que para esta Semana Santa iba a haber 509.000 desplazamientos de entrada y otros tanto de salida en Euskadi, similares a los de 2019. Sin embargo, esta afluencia no ha supuesto finalmente grandes complicaciones en la red viaria alavesa. Especialmente, en uno de sus tramos más concurridos, el enlace de la AP-1 con la A-1, conocido como el nudo de Armiñón. Con el fin de minimizar esas afecciones, el Ejecutivo vasco decidió habilitar para este Lunes de Pascua una operativa de cartelería y coneado que permitirá el acceso ininterrumpido (a una velocidad constante de 80 km/h, sin necesidad de realizar ninguna parada de cesión de paso) del flujo masivo de la AP-1 hacia la A-1 sentido Vitoria-Gasteiz.

A primeras horas de la tarde en este enlace de la AP-1 con la A-1 sí que se intensificó el tráfico, al ser la hora en la que muchos conductores se pusieron de acuerdo para volver a casa tras apurar sus días de asueto. Pese a ello, las mayores molestias se vieron en la A-1, en el punto kilométrico 346, a la altura del polígono de Jundiz, donde un turismo sufrió un accidente por alcance a las 12.40 horas y acabó chocando contra la mediana, pero sin heridos. A partir de ese momento, la circulación se ralentizó hasta tal punto que las retenciones llegaron a ser de hasta seis kilómetros a las 13.00 horas y se tuvo que cortar un carril, sentido Irun, hasta que llegara la grúa para retirar el coche siniestrado. Pero a eso de las 14.00 horas el tráfico se restableció.

En cuanto a las estaciones de autobuses, en la de Vitoria, por ejemplo, se triplicó el número de autocares de larga distancia (los que recorren más de 150 kilómetros). A media tarde esperaban el grueso de llegadas de buses con destino Vitoria o en tránsito hacia otras urbes.

Ayer también terminó la campaña de velocidad que desde el 13 de abril se ha llevado a cabo con el objetivo de que todas las personas que se pongan al volante respeten las señales. Si bien, desde la pasada jornada y hasta el próximo domingo 24 de abril la Er-tzaintza intensificará la inspección de camiones y autobuses.

Última década. En la última década no ha habido víctimas mortales en Euskadi en los periodos de Semana Santa, con las excepciones de 2012 (cuando dos personas fallecieron) y de 2019 (con otros dos decesos).

Lunes de Pascua. Se habilitó una operativa de cartelería y coneado para permitir el acceso ininterrumpido (a una velocidad constante de 80 km/h, sin necesidad de realizar ninguna parada de cesión de paso) del flujo masivo proveniente de la AP-1 hacia la A-1, sentido Vitoria-Gasteiz.