- Dos estudios confirman la resiliencia de la variedad graciano frente al tempranillo, y la idoneidad de mazuelo ante los efectos del calentamiento climático para, en conjunto, valorar el interés en aumentar la superficie de plantación de estas variedades de uva en la Denominación de Origen Calificada Rioja. Sendos investigadores del Instituto de las ciencias de la vid y el vino, de Fernando Martínez de Toda, catedrático de Viticultura de la Universidad de La Rioja e investigador del ICVV, y María Concepción Ramos, catedrática de Edafología y Química Agrícola de la Universidad de Lleida, han evaluado la potencialidad de la variedad graciano, minoritaria, pero autóctona de la DOCa Rioja, así como la respuesta fenológica y de composición de la uva mazuelo desde hace más de una década.

En el caso de la variedad graciano, el estudio abarca el periodo 2008-2020 y a tres zonas con diferente altitud de la DOCa Rioja. Las conclusiones confirman el retraso fenológico de la variedad graciano frente a la de tempranillo, tanto en las altitudes mayores como en las menores, así como las diferencias en su repuesta en años con condiciones climáticas extremas que se han registrado en la última década.

La composición de la uva, en azúcares, acidez y antocianos que ofrece graciano frente a tempranillo, así como el menor desacoplamiento entre antocianos y azúcares que sufre con el aumento de la temperatura en todas las zonas analizadas muestran la potencialidad de graciano como variedad autóctona que puede aportar beneficios significativos, especialmente interesante en escenarios más cálidos. En mazuelo, el estudio observa diferencias en las fechas fenológicas de 18, 29 y hasta 40 días, respectivamente, para floración, envero y maduración entre los años más cálidos y más fríos.