El Gobierno Vasco ha elaborado el informe de criminalidad de 2021 y en dicho documento se recoge la representación cuantitativa y gráfica evolutiva de los últimos cuatro años de las infracciones penales conocidas por la Ertzaintza, destacando los delitos considerados como estratégicos, tales como, los homicidios, delitos contra la libertad sexual, robos con violencia e intimidación, en domicilios, en empresas y comercios.

Según reflejan las estadísticas de dicho informe, la tendencia alcista de los últimos años "se truncó a raíz del confinamiento de 2020, periodo en el cual el número de delitos se redujo en torno al 63% para comenzar una escalada sostenida a partir de abril 2020, coincidiendo con la paulatina vuelta a la normalidad". De hecho, las medidas restrictivas impuestas desde entonces para controlar los contagios han mantenido los valores de la criminalidad estables, aunque siempre por debajo de los alcanzados en 2019.

Sin embargo, los primeros meses de 2021 presentan una trayectoria similar a la segunda parte del 2020, mientras que los datos de los últimos meses de 2021 empiezan a acercarse a las cifras registradas durante el 2019. Entre este aumento de los delitos, también se ha notado una fuerte subida en los robos con violencia e intimidación en torno al 36 %.

Así, en cuanto a los delitos de robo con violencia o intimidación cabe destacar que el pasado año aumentaron concretamente un 35,96 %, en comparación con las denuncias interpuestas en 2020, lo que corresponde a 374 denuncias más, tras pasar de 1.040 a 1.414 denuncias por robo con violencia o intimidación.

Un alto porcentaje de estos robos se han cometido en los domicilios vascos, tras recoger en 2021 un total de 2.511 denuncias, 291 más que en 2020 (877 denuncias menos que en 2019). En este sentido, el aumento progresivo de los robos en domicilio iniciado en el año 2017 se vio interrumpido durante 2020 con un total de 2220 infracciones, cifra que se ha superado hasta llegar a las 2511 en 2021 (+13,11%). Contextualizando 2021 respecto a 2019 los robos en domicilios han descendido un 25,88%.

Respecto a los robos ocurridos en empresas o comercios ha ocurrido una tendencia similar a la acontecida en los domicilios: "En 2020, como en la gran mayoría de delitos, se produjo un decremento de 1419 hechos con respecto a 2019, es decir, una reducción del 38,8%, mientras que 2021 ha experimentado una leve recuperación de la actividad delictiva hasta alcanzar los 2531 robos, cifra relativamente baja respecto al último lustro", informa en el documento.

Datos más positivos

En el otro lado de la balanza, también se han registrado estadísticas más positivas que reflejan una disminución en algún tipo de delincuencia. Por ejemplo, los delitos informáticos pese a seguir siendo una modalidad muy elegida por los amigos de lo ajeno, los cierto es que se ha logrado frenar ligeramente su imparable progresión logrando un descenso del 4,91 %, si bien el volumen de infracciones penales sigue suponiendo uno de cada cinco atestados instruidos por la Ertzaintza.

En este sentido, según detallan, "las estafas se erigen como las grandes protagonistas en este espectro delictivo alcanzando las 14.338 (-8,84%) y suponiendo el 89% del total de los delitos informáticos de 2021". También es destacable el aumento sufrido en los delitos contra la libertad (amenazas, coacciones...), pasando de 420 a 651 infracciones penales (+55%), incremento que se ha agudizado desde 2019 donde se registraron únicamente 322 ilícitos penales.

En el caso de los delitos contra el medio ambiente, en 2021 se han registrado ocho infracciones penales más que en 2020. "En cuanto a los hechos más recurrentes en esta tipología delictiva1 destacan los relacionados con los recursos naturales y el medio ambiente, con 46, y los de maltrato animal con 73", explican.

Por último, en cuanto al tráfico de drogas se refiere, hay que reseñar que 2021 se interrumpe la tendencia alcista de los últimos años con 465 investigaciones realizadas, lo que supone un 8,46% menos que en 2020 pero un 26% más que en 2019.