- Junto con Vitoria-Gasteiz, el gran potencial de Álava como destino turístico son sus espacios abiertos, sus parques naturales y sus montañas. Por ello, históricamente los alojamientos rurales han tenido un gran peso en las pernoctaciones que registra cada temporada el territorio. En 2021, si la vacunación sigue acorralando al coronavirus como lo viene haciendo hasta el momento, el verano puede ser el punto de inflexión para la recuperación de estos establecimientos, tal y como explica Idoia Ezkurdia, gerente de Nekatur, la Asociación de Alojamientos Rurales de Euskadi.

Según señala, para julio la ocupación prevista en virtud de las reservas efectuadas hasta la fecha es del 32,2%, que supera a la del año pasado y, lo más importante, a los de 2019, ejercicio prepandemia en el que la ocupación en julio fue del 30,73%. Para agosto de 2021, por su parte, están reservadas un 38,77% de las plazas en estos establecimientos, por el 39% de hace dos años.

“En este contexto son buenos datos”, señala Ezkurdia, a la espera de “ver cómo evoluciona la situación epidemiológica”. Las perspectivas a ese respecto son esperanzadoras, por el momento, así que “siempre y cuando la vacunación siga avanzando y la incidencia no imponga limitaciones de movilidad o de grupos parece que va a haber actividad y que va a ser un buen verano”, afirma la gerente de Nekatur.

En cuanto a la procedencia de quienes realizan esas reservas, sigue siendo la misma que en ejercicios precedentes. Sobre todo vienen a los alojamientos rurales de Euskadi ciudadanos madrileños, catalanes y valencianos. Eso sí, este año el turismo internacional va a estar muy restringido y apenas hay movimiento de extranjeros en los registros de Nekatur, si bien ya hay algunos grupos de gente procedente de Francia que han reservado casa rural en Álava.