La iniciativa por el derecho a techo y contra la exclusión social, creada el 11 de mayo de 2019 por más de 30 organizaciones sociales y sindicales de Vitoria para denunciar la situación de emergencia habitacional de la ciudad, se ha reunido en la mañana de este sábado en la plaza del Renacimiento de Vitoria, un lugar elegido "como indicador del modelo de ciudad que el Ayuntamiento y las empresas priorizan: seguir construyendo grandes infraestructuras y viviendas de lujo, mientras en nuestra ciudad sigue existiendo gente sin casa y casas sin gente", y donde han exigido pasar de un modelo que se basa en la especulación, a otro que garantice el derecho de la vivienda.

Bajo el lema Apaga los chachullos, enciende los derechos, los portavoces de esta plataforma, Maialen Sáez de Okariz y Albaro Anta, han propuesto las medidas de urgencia a adoptar en esta situación de emergencia habitacional, "ya que en Gasteiz se vulnera a diario el derecho a la vivienda. Pero esta situación de emergencia no ha sido causada por el covid-19, la crisis que ha traído este virus no ha hecho más que visibilizar y agravar la situación. La situación de emergencia ya la vivíamos y el responsable es el sistema que hace negocio aprovechando la necesidad de vivienda de las personas. Es decir, un sistema que antepone el negocio de unos pocos a los derechos de todos y todas".

Por esta razón, han invitado a todos los vecinos de la capital aalvesa a la reflexión y a la lucha, "porque necesitamos repensar y luchar por otro modelo de vivienda, porque en este sistema que se basa en la especulación y en el negocio no podemos esperar que se garanticen nuestros derechos, solo está en nuestras manos luchar por estos".

Reinvindaciones

Sus principales reivindicaciones en esta situación de emergencia son las siguientes:

La primera es la de paralizar los desahucios de todas las personas durante el estado de alarma y siempre.

"El aplazamiento de los desahucios no se ha cumplido en todos los casos durante el estado de alarma, ha sido una medida que se ha aprovechado para la propaganda en muchos casos. Además, no entendemos que las autoridades contemplen el estado de alarma como el único escenario posible en el que parar los desahucios y que además sea por pocos meses. Los desahucios nunca están justificados", opinan.

Su segunda reivindicación es que "la vivienda es un derecho, no un negocio". Para ello, instan a incrementar el parque público de vivienda para alquiler social, que actualmente no alcanza el 2% del parque total de viviendas de la CAPV.

También desean limitar el dinero que destinamos al pago de la vivienda, garantizando el derecho a la vivienda de todas las personas. "Hoy en día tenemos que destinar gran parte de nuestros ingresos a pagar la vivienda y esto nos supone una gran carga en el día a día", argumentan.

En este sentido, piden también que no haya discriminación en el acceso a la vivienda, ya que "la raza, el género, la edad... no pueden limitar el derecho a la vivienda".

Su tercera reivindicación consiste en garantizar los recursos básicos para vivir: agua, alimentación, luz, gas y acceso a internet. "Estos servicios deben ser públicos. Deberían ser derechos, no negocio. En esta crisis sobre todo, hemos visto cómo han aumentado los ingresos de las empresas energéticas, mientras en muchos hogares no encendíamos la luz o la calefacción; durante el confinamiento, nos dimos cuenta de la importancia de tener acceso a Internet... Todos estos servicios deben ser públicos", afirman.

Su cuarta y última reivindicación es la de que nadie se vea obligada a vivir en la calle. "Es responsabilidad del Ayuntamiento y tiene que tomar medidas para acabar con la situación que se da en Gasteiz", destacan.

Aseguran que en nuestra ciudad hay gente que vive en la calle "y los albergues que deberían utilizarse solo para situaciones de urgencia están desbordados. El Ayuntamiento no toma las medidas necesarias para hacer frente a esta situación y con sus acciones no hace más que lo contrario, agravarla aún más. Esto ha quedado claro con la firme intención que ha manifestado de desahuciar a los y las vecinas de Olarizu sin ofrecerles alternativa habitacional".

Esta dinámica que han presentando hoy se acompañará de acciones en los próximos meses "para seguir dando pasos adelante en nuestras reflexiones y luchas. Estad atentas, por tanto, a las convocatorias que organizaremos a partir de marzo".