Con los votos de PNV y PSE, y el rechazo de los tres grupos de la oposición (EH Bildu, Elkarrekin Araba y PP), las Juntas Generales de Álava han aprobado en la mañana del viernes los Presupuestos de la Diputación para 2021, los más elevados de la historia, con 527,7 millones de euros, 106,8 millones provenientes de deuda.

La pandemia absorberá buena parte de las Cuentas, con ayudas a la hostelería o el turismo, pero también se destinarán 105 millones a inversión. El Presupuesto se sustenta sobre tres ejes, la transición energética y la acción por el clima, la digitalización y la innovación social y económica; la política social, y la recuperación económica y el empleo.

Las Cuentas no han tenido el respaldo de ningún grupo de la oposición tras una semana en la que no se ha dado cauce a ninguna de sus enmiendas parciales, lo que ha generado un debate crítico en el Palacio de la Provincia.

Desde Elkarrekin Araba, el juntero David Rodríguez ha censurado esta circunstancia y en concreto la negativa de PNV y PSE a recortar un 20% los sueldos de los cargos para forales para ahorrar 500.000 euros.

"Con el recorte de sueldos de los cargos forales se iban a ahorrar la cantidad que destinan a la hostelería o el comercio", ha manifestado. También ha criticado que no se haya aceptado aumentar la deuda, o negociar el destino de los fondos europeos Next Generation. "Miren a la calle, los servicios públicos se deterioran y se va consolidando una Álava de dos velocidades, la distancia entre una y otra cada vez mayor y esto es peligroso", ha advertido por último.

Por su parte, el presidente del PP alavés, Iñaki Oyarzábal, considera que el desarrollo del debate presupuestario a lo largo de estas semanas "deja al descubierto la falta de voluntad de diálogo de PNV y PSE. Todo era un paripé -ha señalado-, se faltaba a la verdad cuando se ofrecía negociar las Cuentas porque nunca tuvieron la intención de negociar nada, solo querían quedar bien pero aplicando el rodillo de la mayoría absoluta". Oyarzábal se ha mostrado "decepcionado" por el hecho de que pese a no haber presentado una enmienda a la totalidad del Presupuesto, al contrario que Elkarrekin Araba o EH Bildu, ni PNV ni PSE hayan aceptado ninguna enmienda parcial de su grupo.

Desde EH Bildu, Kike Fernández de Pinedo ha señalado por su parte que el Gobierno ha elaborado unas "Cuentas corrientes" en una "situación excepcional", y ha censurado que la respuesta a sus propuestas haya sido "no, no y no". El portavoz soberanista considera que en algunos casos PNV y PSE "no se han leído las enmiendas parciales", y ha afirmado que "es hora de unir fuerzas y no hacer políticas partidistas. Nosotros habríamos cometido errores si gobernáramos, pero lo que no se puede es actuar sin honestidad". En todo caso, "en EH Bildu nos comprometemos a seguir trabajando", ha señalado.

"Necesidades del territorio"

Los partidos que sustentan al Gobierno foral niegan la mayor. La portavoz del PNV, Izaskun Moyua, ha asegurado que su grupo ha hecho "un trabajo serio al responder a las enmiendas" a un Presupuesto que "responde a las necesidades del territorio".

Moyua cree que las enmiendas del PP y Elkarrekin Araba se han presentado "para no ser aceptadas", o que EH Bildu ha planteado posiciones "maximalistas". Para los jeltzales el Presupuesto recién aprobado es "es el más potente con el que ha contado nunca el Gobierno foral, nos permite asentar el presente y mirar con certidumbre al futuro".

En el mismo sentido, el socialista Jon Nogales ha apuntado que "la ciudadanía alavesa, dentro de la incertidumbre en la que nos movemos, recibirá de vuelta su esfuerzo contributivo en forma de políticas sociales y apoyo a los sectores más golpeados" por la pandemia.

Legitimidad

"No han entendido la legitimidad que nos ha dado la ciudadanía para componer esta cámara", ha añadido en referencia a la capacidad de PNV y PSE para sacar adelante las Cuentas, pese a lo cual considera que el Gobierno foral "ha ofrecido sumar". Sin embargo, a su juicio la oposición ha pretendido con sus enmiendas desmontar la estrategia del Ejecutivo foral. "Son unos Presupuestos decisivos para lo inmediato y para el futuro de Álava", ha concluido.

Una vez aprobadas las Cuentas, las Juntas debatirán para sacar adelante con idénticos apoyos las medidas fiscales especiales para 2021, continuación de las diseñadas el año pasado.