- La Policía Local enviará diligencias a la Fiscalía en las que se investiga a un vecino de la ciudad, de 38 años, como presunto autor de un delito tráfico de especies y de maltrato y abandono animal al tratar de enviar un varano a la provincia de Cádiz a través de una empresa mensajería, en una caja de cartón con la indicación de que contenía grillos.

Según los veterinarios municipales, de no haber sido interceptado, el reptil probablemente no hubiera sobrevivido al viaje. Los hechos se produjeron la semana pasada cuando una patrulla del grupo de Medio Ambiente de la Policía Local acudió a una empresa de mensajería de la ciudad donde habían detectado que un paquete se movía por sí solo, sospechando que en su interior podría haber un animal de grandes dimensiones.

Una vez en el lugar, los agentes comprobaron que dentro de la caja había una cría de varano del Nilo, en un envoltorio de tela y atado con unas bridas. A la vista de estos estos hechos, la Policía Local y el Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil) realizaron las oportunas gestiones para verificar la documentación del animal. A falta de una última comprobación con la autoridad administrativa CITES (Convenio sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestre) que determinara la legalidad de la documentación, se entregó el animal a su dueño en concepto de depósito provisional, a la espera del avance de las investigaciones. En la jornada del jueves CITES confirmó la insuficiencia de la documentación aportada por el dueño para poseer legalmente un animal de esa especie. Por ese motivo, ayer grupo de Medio Ambiente de Policía Local se hizo cargo del reptil, comunicando a su propietario su condición de investigado por la presunta comisión de los delitos de tráfico de especies, maltrato y abandono animal Por orden de la autoridad CITES, el varano fue trasladado por agentes del Seprona al centro de acogida Karpin Fauna, en el Valle de Carranza (Bizkaia).