uchas historias dentro de su propia historia tiene la temporada 2003-04 en la centenaria aventura del Deportivo Alavés. En primer lugar, es la campaña en la que el conjunto albiazul regresa a Segunda, tras su periplo de cinco temporadas en Primera. El lustro del casi: casi subcampeón de Liga y casi campeón de la Copa de la UEFA (Europa League).

Es la época en la que el Glorioso disputa diecisiete partidos en competición europea, visitando catedrales futbolísticas como el Giuseppe Meazza (San Siro) milanés o el Westfalenstadion (Signal Iduna Park) de Dortmund. Pero también va a ser la última estación de Gonzalo Antón, que a final de temporada dejará (venderá) sus acciones a una de las personas más detestables, perniciosas y dañinas, para el club y sus aficionados, que han pasado por el Deportivo Alavés: Dmitry Piterman.

Para la reincorporación a la División de Plata del fútbol estatal, el Deportivo Alavés conserva alguno de los futbolistas que han dado lustre al quinquenio prodigioso: Téllez, Astudillo, Pablo Gómez, Magno o Ibon Begoña, a los que se acoplan futbolistas de calidad reconocida como De Lucas, procedente del Chelsea, o, mediada la temporada, el delantero argentino Martín Palermo, cedido por el Betis. Al frente de la nave alavesista, como entrenador, el madrileño Pepe Mel referencia, entonces, del fútbol de ataque y del buen trato del balón.

Allá por el mes de agosto de 2003, cuando el balón echa a andar a más de 2.000 kilómetros de distancia de Gasteiz, en Santa Cruz de Tenerife, el cóctel parece perfecto y bien combinado. La afición albiazul sueña con una gran temporada, que le aúpe de nuevo a la llamada Liga de las Estrellas.

En el campeonato de Liga el equipo, pese a estar rondando los tres puestos de ascenso y en ellos durante varias jornadas antes del final, no tiene suficiente empaque, regularidad y autoridad para lograr el ascenso, que obtienen Levante, Getafe y Numancia. La única alegría que se llevan los aficionados albiazules es el devenir en el Campeonato de España, metiéndose, por cuarta vez en su historia, en semifinales.

Los de Mel eliminan a Racing de Ferrol (1-1 y 1-2 a penaltis), Real Sociedad (2-1), estas dos eliminatorias a partido único, Valladolid (1-1, pasa el Alavés por el valor doble de los goles en campo adversario) y Celta (4-3 global). En semifinales toca en suerte el Real Zaragoza, que el 5 de febrero visita Mendizorroza. Los albiazules se adelantan en el marcador por medio del croata Vucko, a los 18 minutos, y los últimos 14 los juegan en inferioridad por expulsión de Turiel. El brasileño Savio, casi en tiempo de descuento, hace el gol del empate que a la postre clasificará al Zaragoza. La paradoja de este encuentro, marcado por el nefasto arbitraje de Ramírez Domínguez, llega analizando los últimos minutos. Un equipo con ventaja en el marcador, con su portería a cero, en inferioridad numérica, sin haber agotado los tres cambios reglamentarios y nadie desde el banquillo se plantea la posibilidad de realizar ese tercer cambio para arañar algo de tiempo al cronómetro y romper el ritmo al adversario.

El 12 de febrero los albiazules llegan a La Romareda con la necesidad de marcar, al menos, un gol. No marcan ese gol y quedan eliminados, ante un rival que acaba pidiendo la hora. El Deportivo Alavés da la cara en todo momento, pasa apuros, pero, a base de casta y de bemoles, logra sobrevivir y poner el corazón en un puño a los más de 30.000 seguidores del conjunto maño en los últimos diez minutos. La suerte estaba echada desde el partido de Mendizorroza. Pese a no perder ningún partido de semifinales, los albiazules se quedan sin su primera final. Habrá que esperar 13 años.

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último partido

A los 48 minutos se lesiona Iván Alonso. Tras realizarle una resonancia se comprueba la gravedad de su lesión: rotura de ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, con afectación del menisco. Se acaba la temporada para el charrúa que no jugará más con la camiseta del Deportivo Alavés.

"Hemos estado muy cerca de pasar a la final. Tenemos que estar muy orgullosos de la trayectoria copera. Nos vamos sin perder ningún encuentro de los dos. No se valora el Campeonato que hemos jugado, tiene mérito lo realizado".