El Deportivo Alavés ya le ha encontrado destino a Nikola Maraš. El futbolista serbio regresa a la Liga Hypermotion, donde defendió los colores del Levante durante la segunda mitad de la temporada pasada, para jugar cedido en el Sporting de Gijón, uno de los candidatos al ascenso a la máxima categoría. La escuadra asturiana, cabe mencionar, cuenta además con una opción de compra sobre la que, eso sí, no se han ofrecido detalles.
Gracias a este movimiento, el club babazorro ha evitado una de las problemáticas más incómodas del mundo del fútbol, como lo es mantener en plantilla a alguien que no cuenta para el entrenador, en este caso Luis García Plaza. Pese a estar ya recuperado de la operación de rodilla a la que se sometió en marzo del 2023, el técnico madrileño ha dejado claro en varias ocasiones, ya desde el curso pasado, que Maraš no entraba en sus planes.
Buena muestra de esto último es que el serbio, aun con la evidente escasez de efectivos que ha habido en la retaguardia alavesista, no ha aparecido en estas tres primeras jornadas de Liga. Incluso un integrante del filial como Adrián Pica, sin experiencia alguna en el fútbol profesional, ha estado por delante de él. Una situación que nada hacía pensar que fuera a cambiar, mucho menos con Sedlar ya recuperado y Mouriño metido en dinámica.
Hasta el momento, Maraš suma un total de 23 partidos con la elástica del Glorioso. Llegó a Mendizorroza en 2022, como pieza importante del proyecto de ascenso a Primera, y fue titular hasta que se lesionó después del parón invernal de aquella temporada. Desde entonces, sus participaciones como babazorro se han limitado a la Copa del Rey, donde jugó el ejercicio pasado frente al Deportivo Murcia, Terrassa y Athletic Club.