Sin sorpresas de ningún tipo. Como cabía esperar, el expresidente del Deportivo Alavés Dimitri Piterman no se ha presentado al juicio que se ha abierto contra él a partir de este lunes por la presunta apropiación indebida que realizó durante su mandato al frente del club vitoriano durante el trienio entre 2004 y 2007, por lo que el tribunal le ha declarado en rebeldía desestimando el aplazamiento del juicio.

El juicio, previsto durante toda la semana, ha comenzado en la Audiencia de Álava en medio de una gran expectación. Incluso se ha podido ver a aficionados con la camiseta del Alavés fuera de los juzgados.

Sí ha acudido a la vista el otro encausado, la 'mano derecha' de Piterman, el empresario cántabro José Nereo, muy cambiado respecto a su etapa en Vitoria y que ha estado acompañado de algún familiar e incluso un guardaespaldas.

Al empezar la vista, la defensa de Piterman ha alegado razones médicas para pedir la suspensión. En concreto, ha explicado que mañana martes está previsto que se le opere de la rodilla, en California, donde reside desde hace años junto a su nueva pareja.

A renglón seguido, la defensa ha asegurado que Piterman tiene la intención de comparecer en el futuro, por lo que ha pedido aplazar el juicio oral. Los abogados defensores de Nereo se han sumado a la petición de aplazamiento, algo que finalmente no se ha producido.

El fiscal ha reclamado sin embargo que se celebre el juicio por entender que la información médica presentada es insuficiente, que el juicio lleva señalado desde octubre del año pasado y que Piterman no ha colaborado, sino que ha ido complicando su localización.

Pepe Nereo, a su llegada al juicio Alex Larretxi

Finalmente, el tribunal ha decidido que el juicio siga al no considerar justificada la ausencia de Piterman porque no es una operación de urgencia, sino programada, y en una clínica privada, por lo que no está en lista de espera. Además de seguir el juicio, la Audiencia le ha declarado en rebeldía.

Ahora, la vista durará toda la semana con la sola presencia de Nereo como acusado, ya que Piterman queda fuera del juicio. Sobre el ucraniano se ha dictado una orden de arresto internacional.

No es la primera vez, por otro lado, que se imputa a Dmitry Piterman por su desfalco al Alavés. Ya fue condenado por la propia Audiencia Provincial de Álava a indemnizar con 6,8 millones de euros, pero dicha compensación fue anulada en 2015 por el Tribunal Supremo debido a que se estableció por responsabilidad por déficit, cuando “legalmente” no procedía. Sí se le mantuvo la inhabilitación, de 15 años, para administrar bienes ajenos.

En este nuevo intento, según el escrito de la Fiscalía, Piterman y Nereo vuelven a ser juzgados por apropiarse fondos del Glorioso, al que, “actuando en su propio beneficio”, causaron un perjuicio de 3.161.968 euros.