Antonio Blanco se perderá la visita del Betis tras ver la roja directa ante Osasuna

El Alavés tiene nuevos motivos para sentirse perjudicado por los arbitrajes. Si hasta este domingo quienes estaban en el punto de mira eran los colegiados del VAR tras los agravios sufridos en los partidos ante el Getafe, Rayo Vallecano y Celta, quien encrespó esta vez al equipo y afición fue el árbitro de campo con su determinación de expulsar a Antonio Blanco al inicio de la segunda mitad.

Poco después de que Hagi malograra una clarísima ocasión para subir el 1-1 al marcador, llegó el mazazo en contra del equipo vitoriano que terminó de decantar el partido a favor de Osasuna.

Un contragolpe rojillo acabó con el balón en los pies de Arnaiz, cuyo control antes de encarar a Sivera fue defectuoso y en ningún caso podía alcanzarlo para tratar de batir al guardameta albiazul.

Antonio Blanco le derribó cuando ya había perdido la ventaja ante el marco rival, pero fue expulsado por ser el último hombre ante la consiguiente desesperación de Mendizorroza. Figueroa Vázquez ni siquiera acudió al VAR para revisar la polémica y ahí quedaron enterradas las esperanzas del Glorioso de sumar algún punto.

Lo cierto es que el árbitro andaluz fue el triste protagonista durante ciertos lances del partido y tomó decisiones surrealistas como una amarilla a Omorodion en un salto por el balón con David García.

En definitiva, más leña al fuego del tremendo enfado en las altas esferas albiazules con los arbitrajes sufridos en estas ocho primeras jornadas.

Sin Antonio Blanco por sanción y con la duda de Jon Guridi por molestias musculares, Luis García tendrá que recomponer el centro del campo ante el Betis. Benavídez podría tener opciones de salir en el once junto a Guevara porque el técnico madrileño carece de excesivas alternativas en dicha zona del campo.