Sin apenas un margen de tiempo destacable para valorar los aciertos y, sobre todo, corregir los errores del último empate ante el Racing, los pupilos de Luis García afrontan hoy una nueva oportunidad para seguir en lo alto de la tabla. El Deportivo Alavés recibe en su feudo a las 21.00 horas al Zaragoza, un histórico del fútbol estatal que demuestra a la perfección la inmensa complejidad de la categoría de plata, pues pese a su envidiable palmarés acumula una década en Segunda sin poder acercarse al balompié de primerísimo nivel.

Los albiazules, que apenas tres días después de su último compromiso en tierras cántabras volverán a batirse en duelo ante un ilustre de la categoría de plata, han cumplido ya un tercio del curso respondiendo con nota a las expectativas generadas al comienzo de la temporada. Con 27 puntos a buen recaudo en el granero babazorro, el conjunto vitoriano es el colíder de la categoría junto al Burgos y continúa imbatido en Mendizorroza, el fortín en el que ha obtenido cuatro triunfos y tres empates.

La realidad es que en esta categoría las relajaciones se pagan caras ya que las distancias entre el cielo y el infierno son mínimas y que, así, en cuestión de una semana, cualquier equipo puede escalar o bajar posiciones de una manera abrupta.

El Zaragoza, por su parte, afronta la decimoquinta jornada del campeonato liguero como un match-ball para la continuidad del técnico tras caer en su estadio ante el Andorra en un encuentro en el que el conjunto del Principado marcó sus dos goles en el tiempo añadido de la primera y segunda mitad. Una fase del partido en la que, precisamente, el Alavés logró el triunfo hace menos de una semana ante el Oviedo tras volcarse en ataque en los minutos finales del partido.

El conjunto maño, que navega por la zona media-baja de la clasificación con una distancia mínima respecto al descenso, venció ante el Tenerife en su último partido como visitante y, además, dos de sus cuatro victorias del presente curso han sido lejos de La Romareda. De hecho, el preparador del Alavés sugirió ayer que el Zaragoza se encuentra más “desinhibido” en sus compromisos lejos de Aragón.

La escuadra dirigida por Juan Carlos Carcedo, que continúa en entredicho por la parroquia zaragozana, es una de las más jóvenes de toda la competición, conecta la veteranía de los hombres experimentados como Cristian Álvarez y Zapater, emblemas del vestuario maño, con el desparpajo de los atacantes prometedores como Mollejo y Giuliano Simeone, quien se ha convertido en una de las sensaciones más positivas del curso. Sin embargo, la principal debilidad del próximo rival del Glorioso no es otra que la falta de regularidad en sus resultados, ya que de cada tres partidos han caído derrotados en uno de ellos.

Luis García estará forzado a realizar varios cambios respecto a su último once debido a la carga de minutos de una semana en la que el Glorioso ha disputado hasta tres partidos. Además de las ausencias por lesión de Sylla y Sedlar, Alkain será baja por su expulsión directa ante el Racing. Esto mismo proporciona una vacante en el carril derecho, una demarcación en la que el conjunto albiazul cuenta para la causa con Jason y Rober. Maras, que fue sustituido en el descanso durante el último choque, está en condiciones para jugar ante el Zaragoza pero se decidirá hoy mismo si es de la partida o no. Laguardia se perfila como titular.

La nota positiva del último compromiso ante el Racing es que De la Fuente se reencontró con su cita goleadora. El ariete vallisoletano, cuyas fortalezas se remiten en mayor medida a su incesante trabajo en la presión y en la movilidad entre centrales, recogió el premio a su insistencia y se convirtió con cuatro dianas como el máximo artillero del Alavés. Ahora bien, es evidente que el cuadro de Luis García no se distingue por la presencia de un goleador nato y, por eso mismo, la suma en materia realizadora de todos los jugadores de campo se antoja fundamental para mantenerse en lo más alto.

En cuanto a los precedentes entre ambos, las últimas cinco visitas del Zaragoza al territorio gasteiztarra se han saldado con tres empates y dos triunfos para el cuadro vitoriano. Además, de las diecisiete ocasiones en las que ambos contendientes se han enfrentado, el conjunto maño tan solo ha obtenido el triunfo en cuatro de ellos, una estadística que sugiere la dificultad de Mendi.

El peligro maño: Giuliano Simeone asoma la pata

Hijo del ‘Cholo’. La Segunda División es una categoría en la que cada temporada emergen futbolistas prometedores y que desean dar el salto a Primera gracias a un paso intermedio en una competición futbolísticamente inferior. Fue en la categoría de plata donde el barcelonista Pedri maravilló durante su etapa en Las Palmas y donde otros como Luis Milla dieron el salto al fútbol de primer nivel. Así, el Zaragoza tiene en sus filas a Giuliano Simeone, que a sus 19 años ha asumido galones en la vanguardia del cuadro dirigido por Carcedo. El hijo del ‘Cholo’, que al igual que su padre se desenvuelve sobre el césped con garra y dejándose la piel, acumula tres goles y dos asistencias en el conjunto maño. El joven ariete, cedido por el Atlético de Madrid, está viviendo su primera experiencia como profesional después de su anecdótico debut con el conjunto rojiblanco de la pasada temporada.