La principal novedad en el once que eligió Javi Calleja para enfrentarse al Real Betis estuvo en la punta de ataque. Tras dos partidos como suplente, Joselu Mato regresó ayer a la titularidad con el objetivo de dar al Deportivo Alavés esa proyección ofensiva que había brillado por su ausencia en San Mamés.
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Sin embargo, pese al inédito tiempo de descanso y reflexión, el atacante gallego no pudo ofrecer al equipo lo que este necesitaba de él y, de nuevo, el conjunto babazorro terminó el partido con su marcador a cero.
Además, el problema no fue que el nueve albiazul no estuviera acertado, el principal motivo de preocupación es que ni siquiera tuvo la oportunidad de poner a prueba la portería de la escuadra verdiblanca. Y es que, una vez más, Joselu no supo relacionarse con sus compañeros y esto, por ende, provocó que las opciones del Glorioso en ataque disminuyeran sobremanera.
Ante esta situación de falta de peligrosidad, una de las obligaciones de Calleja es recuperar al futbolista nacido en Stuttgart. Para ello, lo principal es olvidar lo sucedido este verano con el Sevilla, cuando se frustró su salida de la entidad del Paseo de Cervantes, y recuperar la motivación de uno de los futbolistas más relevantes que ha pasado por Mendizorroza en los últimos tres años.
Si el técnico madrileño no lo consigue, dependerá de la valía de dos delanteros sin experiencia en Primera División -como son Miguel De la Fuente y Sylla- o de otro que apenas ha conseguido aportar nada desde que llegó a Vitoria (Guidetti).
